Un hilillo de luz para Honda
No lo digo porque Fernando haya ganado la carrera -que no- o porque haya logrado dos puntos -¡por fin entre los diez primeros!-, lo que me parece casi anecdótico. En condiciones normales no habría puntuado, Bottas no habría sido segundo ni Ricciardo hubiera vencido. Pero las circunstancias quisieron esto, una de los domingos más locos que se recuerdan.
Lo digo por la mejora del motor Honda RA617 H Evo 3, que se estrenó el viernes. No se utilizó en carrera. Alonso se paró en pista en los Libres 3, pero oficialmente no se rompió la unidad de potencia sino que fue la caja de cambios la que cedió. Pero eso es, también, una anécdota.
Lo importante es que el viernes se notó una mejora de prestaciones. Honda la cifra en tres décimas. No es mucho, pero por algo se empieza. Y soy consciente de que he dado muchos 'palos' a Honda, me he mostrado escéptico ante unos progresos que anunciaban y no se veían, y he tomado muchas declaraciones de Alonso más como deseos y esperanzas que como una realidad palpable o al menos intuible.
Ya he dicho muchas veces que más que las posiciones me interesan los cronos, las diferencias. Y en circuito tan largo como Bakú y tan poco adaptado al McLaren, la impresión del nuevo motor es positiva.
No hay en Bakú curvas donde la carga aerodinámica juegue un papel determinante; son ángulos cerrados que minimizan la eficacia aerodinámica. Cuentan la tracción y la capacidad de aceleración. Y sobre todo, un circuito con la recta más larga del campeonato, dos kilómetros, que debería convertirse en una agonía para el McLaren, sin poder resistirse a sus perseguidores.
Su crono de los libres dos, a sólo 2'1 de la cabeza y sin haber podido rebajarlo aún más por la avería de la caja de cambios -según el comunicado oficial- cabe considerarlo esperanzador, el primer signo positivo en lo que llevamos de temporada.
Después en la Q1, con el motor anterior, Alonso estuvo a sólo 1'8 de la cabeza, excluido Lewis Hamilton que voló mucho más allá de lo previsible, quizás porque quería comprobar que los problemas del viernes eran cosa del pasado.
Habrá que esperar. No sé si la lucecita que atisbo es una simple fijación de una rendija del túnel, o anticipo del final del mismo… aún lejano. Ahora bien, dos Grandes Premios (Austria y Silverstone) que no deben ser fáciles. Quizás en Hungría podamos decir algo más. Entre tanto, cruzo los dedos. Ni Alonso puede permitirse desperdiciar más su tiempo ni la Fórmula 1 ver a Fernando y McLaren al fondo del pelotón.
Lo que tengo claro, en Bakú Honda se ha ganado un voto, tímido aún, de confianza.
