Sí, Carlos Sainz pudo haber luchado por la victoria en Hungría
Algunos se preguntarán si ello es cierto o tanto el madrileño como Ferrari exageran, pero tienen razón. No sé si Carlos hubiera podido con Esteban Ocon, pero hubiera estado pegado al 'culo' del francés de no ser porque en Ferrari perdieron casi tres segundos cuando, como todos, paró a cambiar los neumáticos de lluvia por los de seco justo antes de la segunda salida.
Sainz, tras su accidente la víspera en la clasificación, salía en 15ª posición. Una posición desde la que sumar grandes puntos parecía poco menos que imposible… Sobre todo en Hungría, donde adelantar no es sencillo. Pero a la vez en esta ocasión fue casi una bendición porque haber salido en la posición que en teoría le correspondía le hubiera colocado en el centro de la tormenta perfecta, esa que dejó a Max Verstappen sin opciones, que acabó con los sueños de Charles Leclerc, Lando Norris, Valtteri Bottas, Sergio Pérez y Lance Stroll… y que retrasó algo a algún piloto que salía por delante como Fernando Alonso.
Salir en 15ª posición y acabar con el podio puede ser algo al alcance de un piloto de Red Bull o de Mercedes, pero es algo que resulta impensable para todos los demás. Ganar 12 posiciones con un Ferrari sólo parece factible si se sale en última posición o bien ocurre una 'catástrofe' en el primer giro, como así sucedió.
En realidad, Carlos hizo todo el trabajo en la primera salida, encontró el hueco a través del caos. De 15º a nada menos que tercero…pero la parada en boxes para colocar los neumáticos de seco en la resalida, cuando sólo Hamilton estaba en parrilla, arruinó sus opciones de triunfo: no fue una buena parada y Sebastian Vettel, Nicholas Latifi y Yuki Tsunoda se le colaron, tres posiciones perdidas que marcaron su carrera.
Cuando ves que TODO se está desmoronando a tu alrededor pero consigues aguantar con la cabeza fría
— DAZN España (@DAZN_ES) August 2, 2021
¡Qué salida inolvidable de @Carlossainz55! pic.twitter.com/eHm4iCBl3A
No es la primera vez que los de Ferrari 'se encallan' en un cambio de ruedas y que Sainz lo 'paga' en posiciones, pero ésta fue una de las que más lo lamentó porque el resultado hubiera sido de campanillas.
Tenía razón Sainz cuando dijo que tenía mejor ritmo que los de cabeza. Sufrió en la primera parte de carrera, sin poder superar a Tsunoda. Cuando el japonés y Latifi pararon a cambiar gomas, Sainz estaba a 18 segundos de la cabeza, diferencia que redujo a 12 cuando paró en boxes a cambiar ruedas.
Y cuando salió, tiró como un loco… y redujo esta diferencia a la mitad, sólo seis segundos cuando Ocon y Vettel se detuvieron. Incluso fue reduciendo paulatinamente esa diferencia en los giros siguientes, hasta cuatro segundos, momento en el que sus gomas acusaron que llevaban más giros que las de sus rivales.
Estabilizó la diferencia entre siete y ocho segundos, hasta que los primeros doblados le hicieron retroceder y el adelantamiento que le hizo Hamilton hizo que la diferencia aumentara a 13 segundos, momento de 'arrojar' la toalla ya que sólo quedaban media docena de vueltas y Alonso se había colocado 'bajo su ala trasera'.
