Lo de Hamilton me recordó al GP de China de 2007

07/06/2021 13:52

¿Lo recuerdan? A Lewis lo llamaron a boxes para su segundo cambio de neumáticos, falló en la frenada –la pista estaba mojada– y quedó aparcado en la grava ante la desesperación de McLaren por un error tan ridículo como gravoso en términos de campeonato.

"He cometido un error. ¡Lo siento! Es el primero de la temporada. No se podía pensar que acabaría el año sin cometer ninguno", señaló el piloto.

La pista se estaba secando y sus neumáticos –creo que eran intermedios– estaban en las lonas. No había podido evitar que Kimi Räikkönen, su rival por el título, le superara. No fue un error de pilotaje, sino de evaluación. No tuvo en cuenta que mientras la pista se secaba por el paso de los coches, en la entrada de boxes no iba a suceder lo mismo por la sencilla razón de que por allí apenas pasaba un coche de tanto en tanto.

Entonces, en Mundo Deportivo, escribí que "dio la impresión de que pensó más en el resultado parcial, la victoria en China, que en el Campeonato".

Es cierto, Kimi y Fernando Alonso, sus rivales del título aquel año, eran mucho más rápidos. Le sacaban cuatro y cinco segundos por vuelta porque acaban de parar para colocar las gomas de seco y Lewis aguantaba con unos intermedios en las lonas "porque había aviso de retorno de la lluvia en cuatro o cinco vueltas y se hubiera ahorrado una parada", dijeron en el equipo a modo de explicación del error de no haberlo llamado antes.

La entrada del box de China es un codo de 90º, se llega a 240 kilómetros/hora y se frena para ponerse a 50 kilómetros/hora. Entre el estado de las gomas y el asfalto ligeramente mojado, el daño fue irreparable. Perdió la trasera y los neumáticos quedaron enterrados en la grava sin que esta vez hubiera una zona cementada que en otras ocasiones le salvó. Tampoco había comisarios que le empujaran para devolverlo a la pista, como había sucedido en Nürburgring durante el Gran Premio de Europa. Lewis explicó que no sabía exactamente cómo estaban sus gomas traseras "porque los retrovisores sucios no me permitían verlas".

Era un 'match ball' desperciado. Le bastaba con acabar en cuarta posición para ser campeón ya en China y esa fue la clave de que entregara el título a Räikkönen.

Entre lo de ayer en Bakú y lo de China en 2007 hay diferencia sustanciales. Aquí ha perdido la oportunidad de recuperar el liderazgo; allí lo mantuvo, pero Kimi le dio prácticamente alcance. Pero, sobre todo, tras Bakú queda todavía muchísimo campeonato; en China era la penúltima carrera y debía ser la de la coronación.