La F1 mantiene el calendario de entrada del techo presupuestario

Ya el próximo año, los equipos no podrán gastar más de 145 millones de dólares, aunque el salario de los pilotos, una parte del pago de motores, los tres salarios más elevados, gastos de marketing y gatos de viajes quedarán fuera de esta cifra. Está claro que con este límite junto a otras disposiciones de los reglamentos que asimismo encorsetan las posibilidades de utilización de túnel de viento y CFD obligan a los equipos a disminuir el presupuesto y el personal dedicado a I+D.

Al cambio de hoy, esta cifra no son los 130 millones de euros que se habían dicho en un principio sino poco más de 124,6, ya que el un dólar equivale a sólo 0,86 euros, es decir el valor del dólar ha sufrido un quebrando del orden del 4%. Recordemos que el techo presupuestario fue acordado en octubre del pasado año y establecido inicialmente en 175 millones de dólares, pero fue reducido a 145 millones para 2021, 140 en 2022 y 135 a partir de 2023 el pasado abril, cuando la pandemia comenzó a hacer estragos y no se sabía si este año los equipos podrían llegar a correr. Y se introdujeron limitaciones mayores al uso de determinadas herramientas de I+D.

Sin embargo, habrá una pequeña derogación, o mejor dicho una cantidad extra de dinero, para que los equipos con mayor número de personal puedan amortizar los puestos de trabajo. Los equipos disfrutarán así de 6 millones de euros extras para hacer frente a despidos y recolocaciones, siempre que esto sea para disminuir el número de trabajadores.

Las razones de ello están en que no hay una norma común para todos los países europeos y cada uno de ellos tiene su propia legislación –preavisos, indemnizaciones, etc– regulatoria para los despidos. Si en Gran Bretaña pueden ser de la noche a la mañana, en Italia o Suiza no es así

Los equipos afectados por tener que disminuir personal son Ferrari, Mercedes, Red Bull y también McLaren. Sólo el primero ya ha dicho que recolocará parte del personal con un programa deportivo alternativo –Le Mans o IndyCar– mientras que otra parte del personal pasará a otras áreas de la empresa, desde el departamento de competición para clientes a la concepción de vehículos de Los equipos pueden optar asimismo por reducir su masa salarial, a través de recortes en las nóminas, para disponer así de dinero extra para dedicar a I+D. Y también no renovar -o no hacerlo en las mismas condiciones- los contratos que lleguen a su finalización.

Son negociaciones que parecen muy complicadas de afrontar durante esta temporada, por lo que se dejan para final de la misma.