De Jordan a X, pasando por Midlands, Spyker y Force India

23/07/2018 22:07

Posiblemente un paso previo para que el equipo sea transferido a Lance Stroll, tal como informa Ana Vázquez en esta página y también de saber si Mercedes se decide a darle estatus de equipo B, con todo lo que ello implicaría para atraer inversores y compradores.

En realidad, si hay alguna sorpresa está reside en que el equipo haya podido llegar tan lejos dada la situación jurídica/financiera de sus dos máximos propietarios, Vijay Mallya y 'Tony Sahara'.

Vijay está 'exiliado' en Gran Bretaña por las órdenes de búsqueda y captura que pesan sobre él en India por la quiebra de su línea aérea Kingfisher y que ha tenido que vender el gigante cervecero indio del mismo nombre al grupo Diageo para cerrar otro largo litigio.

Sahara se encuentra en prisión, por una estafa en la captación de fondos de ahorros a campesinos indios, desde hace varios años.

Sorprendentemente, pese a todos estos problemas, que comenzaron hace ya más de tres años, hasta la fecha, el equipo había sobrevivido bien. Pocos fondos, quizás, pero la imaginación y ganas junto a un equipo humano motivado y conjuntado le permitían salir a flote. El pasado año, sin ir más lejos, fueron los mejores 'de los otros', cosa con la que muy pocos contaban.

Pero este año las cosas no se han podido mantener; la ilusión y competencia de unos hombres es insuficiente para mantenerse a flote sin un mínimo de financiación. Los esperados nuevos inversores no llegaron. Los patrocinadores son una especie que o está hibernando o ha 'emigrado' a otras tierras. Los nombres barajados como posibles compradores -una tónica 'de lujo'- no parecen tener solidez. El equipo pidió oxígeno en forma de anticipo sobre su parte de los derechos comerciales, que no está claro le haya sido concedido.

La historia de este equipo, desde que fue fundado como Jordan en 1991 –bueno, a en el '90 para estar en pista en el '91–, parece ser casi la misma. Destinado a ofrecer unos golpes de efecto y a sufrir penurias económicas y cambios de manos.

Eddie, ex piloto, avispado banquero, lo fundó pensando en el negocio y se desprendió de él tras 250 Grandes Premios, cuatro victorias y 19 podios a finales de 2006, tras tres años de pobres resultados y dificultades. Fue la marcha de Honda lo que desencadenó el bajón, la pérdida forzosa de un casi un 20% de personal y la necesidad de vender.

En cualquier caso, Eddie permitió el debut en F1 de Michael Schumacher, tuvo a pilotos como Hill, Alesi, Fisichella, Trulli o Frentzen... con este tuvo que litigar por despido improcedente a media temporada. Curiosamente en 2004 obtuvo su 4ª y última victoria, la más rocambolesca, porque Fisichella no vio la bandera a cuadros en Interlagos... se acababa de salir en la puzolana por la lluvia. En Jordan intentaban un desafío imposible... acabar sin parar y esa salida acarreó bandera roja. Como en ese caso gana el líder en la vuelta anterior, 'Fisico' fue declarado ganador.

El comprador en 2005 fue un millonario canadiense de origen ruso Álex Shnaider que lo rebautizaría más en 2006 como Midland, el nombre del grupo industrial de su propiedad, con importantes intereses en el mundo del acero, portuaria, maquinaria agrícola, etc. Pero con cero puntos y alertado del coste que supondría ir a la busca de resultados, Shnaider se lo sacó de encima muy deprisa.

Encontró comprador. La presencia del holandés Christijan Albers hizo que la familia De Mol, propietaria de Edemol y Lost Boys –que había sido patrocinador de Jos Verstappen–, se interesara en el proyecto junto con Victor Muller, que intentaba lanzar una marca de vehículos deportivos de lujos recuperando el nombre de Spyker, una marca holandesa de la primera década del siglo XX.

Skyper tuvo graves problemas financieros y a finales de 2007 se vio forzada a vender el equipo a Vijay Mallya, aunque Micael de Mol conservó una pequeña participación. Más adelante, Mallya llegó a un acuerdo como Tony 'Sahara', líder del Grupo Sahara, que compró la mitad de las acciones de Mallya. Todo ello antes de que llegaran los problemas legales de ambos copropietarios.

Si Lance Stroll, o algún otro, lo compra será el quinto propietario del equipo. La transacción debe hacerse rápidamente o de lo contrario los problemas se agravarán. Hay personal de Force India que podría estar tentado de ir a otro equipo.

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