¿Apostará la Fórmula 1 por la gasolina sintética sin emisiones?

10
03 Jun 2019 - 08:28

"Está claro que necesitamos motores más potentes y de una potencia duradera. En el curso de los próximos años veremos el nacimiento de nuevos tipos de carburante, de origen bio o no, de composición diferente, incluso de síntesis procedentes de fuentes no fósiles, que podrían ser muy atractivos y que nos obligarían a desarrollos nuevos. Es una vía quizás menos emocionante que un buen motor atmosférico ruidoso, pero es seguramente la vía idónea si queremos ser útiles al deporte, la industria y la sociedad", señaló Abiteboul.

Confieso que me quedé un poco perplejo ante la afirmación. Está claro que hoy en día el carburante es un elemento vital para el rendimiento de un motor de Fórmula 1. Tanto que incluso muchos motoristas admiten a las bravas que esperan mucho de un nuevo carburante –pese a las restricciones reglamentarias– para poder mejorar el rendimiento de sus motores. Un rendimiento que hoy ha superado ya el umbral que se creía inalcanzable del 50% por el 29% de hace muy pocos años.

Ya hubo en su día gasolinas sintéticas en la Fórmula 1. En la primera era turbo se recurrió a ellas para conseguir gasolinas de alta densidad o pesadas, con más atómos de carbono, con el fin de obtener más calor en cada combustión. ¿Se acuerdan de aquellos motores turbo de 1.5 litros que llegaban a dar 1.500 caballos en clasificación?

Unas gasolinas, eso sí, que se debían manipular con sumo cuidado, por mecánicos especialistas que llegaron a vestir trajes especiales, gruesos guantes de gomas y mascarillas. Se decía que los vapores de las mismas eran letales para los pulmones –o al menos cancerígenos– y se prohibieron.

Reconozco que no le di más importancia hasta que en un artículo reciente leí que los fabricantes creen que puede haber combustibles nuevos sin emisiones de CO2.

Recordé de inmediato los trabajos del Grupo Volkswagenm y más concretamente de Audi, sobre combustibles sintéticos. Y ello tanto para motores gasolina como para los Diesel, las denominadas por la firma de los cuatro aros e-gasolina y e-diesel –en los que la 'e' va por ecológica y no por eléctrico, obviamente, ni por la 'e' que define a los biocarburantes–.

Combustibles que tienen como origen el tratamiento de agua y CO2 como materias primas. Así que quizás lo de no emisiones no va tanto en el sentido de que no emitan CO2; sino que lo que emiten no permanecería en la atmósfera y se usaría para fabricar más combustible.

Y todo ello coincidió con una de las magníficas 'La Contra' de La Vanguardia, en la que Lluís Amiget entrevista a Richard Schrock, premio Nobel de Química por 'reacción de Schrock', para romper el doble enlace de carbono –C=C– de los alquenos, que facilitará mucho la obtención de nuevos materiales. Para él, la humanidad ha traspasado el punto de no retorno de emisiones de CO2, pero espera que aún estemos a tiempo de retrasar el punto final. Y habló de que en Suiza ya hay fábricas que capturan el CO2, clave ésta para los planes de los e-combustibles de Audi.

Schrock está trabajando con la Universitat Rovira i Virgili en una reacción catalizada para manipular moléculas y evitar que consuman energía y generen CO2, una reacción que genera energía sin quemar ningún tipo de combustible fósil y busca la creación de moléculas mucho más energéticas que provienen de árboles, hojas o residuos urbanos; estos también son objeto de investigación por parte de algunas marcas.

Todos estos datos me resultaban inconexos con la Fórmula 1 hasta que saltó el rumor –no confirmado– de que un representante del Grupo Volkswagen ha estado en estas reuniones de trabajo y entonces todo comenzó a tomar forma.

La idea parece que es la introducción paulatina de esas e-gasolina en la Fórmula 1 entre 2021 y 2025, simplemente obligando a que el combustible empleado sea una mezcla de la actual gasolina y una e-gasolina, aumentando de forma paulatina cada temporada el porcentaje de esta última, del 20% en 2021 al 100% al final del periodo. Hay que tener en cuenta que ese 20% sería en volumen, pero no en peso porque la gasolina sintética sería más pesada que la tradicional.

Se dice que la Asociación de Fabricantes de Combustibles ya ha aprobado el plan, o al menos las bases del mismo. Y los motoristas también están dispuestos a aceptarlo para que el rendimiento de los motores pueda alcanzar el 60% en 2025. Es un objetivo que los ingenieros de Mazda asumieron como alcanzable incluso para motores de serie en unos años.

La idea de la FIA parece que es la de jugar dos cartas: tanto la de la motorización eléctrica como la de esta nueva de gasolina sin emisiones o mejor dicho 'carbón neutral', aunque este concepto hoy en día se maneja con excesiva y permisiva amplitud.

Las reglas de 2021 está previsto que se anuncien la próxima semana, en concreto el 14 de junio. Espero con interés lo que dirán.