11 días para los test: ir despacio para no clasificarse o la maniobra desesperada de Arrows

10/02/2024 09:25

Apenas rodó en los libres del sábado –el viernes no hubo 'competición' mientras se reparaban las vallas del circuito, a lo que colaboraron controles, mecánicos e incluso algún jefe de escudería– y en el momento de la Clasificación se limitó a dar tres vueltas a paso lento y se quedó ¡a 45 segundos de la pole! No más allá del 107% que exigían les reglas, sino incluso del 150%.

Aunque hubo un intento de clasificarlo de oficio, Emerson se desmarcó inmediatamente de Barcelona. Había hecho la clasificación, no se había clasificado… no había nada de sancionable.

Años más tarde la historia, por otros motivos, se repetiría. Fue en el GP de Francia de 2002 cuando los dos pilotos de Arrows, Heinz Harald Frentzen y Enrico Bernoldi no rodaron el viernes –ya no lo habían hecho en la prueba anterior– y en clasificación corrieron muy lentos y no lograron plaza en la parrilla.

El equipo estaba por aquel entonces con telarañas en las arcas. Tony Walkinshaw tiene prácticamente la mitad, Morgan&Grenfell, la otra. Pero las partes no se entendían y el banco de inversiones no aflojaba más fondos.

No correr un GP significaba una fuerte multa. Pero no había dinero para cambiar los motores ya exhaustos, ni para pagar el coste de una carrera; cada kilómetro recorrido cuesta dinero. Walkinshaw encontró una salida, mientras soñaba con convencer a nuevos inversores: en Magny Cours rodarían en Clasificación, pero no marcarían el crono mínimo para estar en la parrilla. El mismo sábado, el equipo Arrows, con el mínimo de personal, se volvió a casa.

Morgan&Grenfell es asimismo socio de Ecclestone, al comprar una participación una participación del 50% en SLEC. Bernie estaba furioso. No podía multar al equipo, pero sí amenazar con una multa cuantiosa, 500.000 dólares si la historia se repite. En otras ocasiones había ayudado a un equipo y Morgan&Grenfell es su socio. Pero no mueve un dedo en esa ocasión.

La realidad es que el banco está en serias dificultades, al borde de la quiebra. La inversión en la F1 le ha dejado un agujero de 250 millones de Libras.

Era el fin de Arrows. Estuvieron en Alemania y rompieron los motores. Cosworth les retiró las centralitas electrónicas. Hubo un solo coche en Hungría y no llegó a arrancar. En Spa volvían a estar los dos coches pero Cosworth no les dio la centralita y debieron empaquetar y volver a casa. Ya no volverían a aparecer en el paddock.

De hecho, Tom lo sabía y desde hacía algún tiempo estaba trabajando con un nuevo proyecto, el equipo Phoenix, asociado a Charles Nickerson. Pero el proyecto no llegó a materializarse. Lo sucedido en 2002 dejó a Tom fuera de juego.