Tost espera una fuerte rivalidad entre Sainz y Kvyat a final de año

"Tienen una buena relación", ha comentado a Motorsport.com. "Se conocen de otras veces, pero esperemos a que se igualen en pista. Entonces el juego empezará de nuevo, es normal. Porque no hay diferencia sobre si es Max Verstappen, Daniil Kvyat o Carlos Sainz". 

Tost relaciona la calma actual con la situación entre Sainz y Kvyat en el campeonato. Desde el Gran Premio de España, el ruso no ha podido superar al español en ninguna carrera, consiguiendo tan sólo 2 puntos por los 26 conseguidos por el madrileño. 

"Actualmente tenemos la vida facil porque Carlos está por delante. Espero que eso cambie pronto y ambos se igualen, y entonces empezarán a competir entre ellos en la pista, quizá llegándose a tocar. La historia habitual. Así es como es esto", ha proseguido el team principal de Toro Rosso.

"Les puedes decir que no hagan esto o no hagan lo otro, pero están compitiendo y así son las cosas. Espero que la segunda mitad de temporada sea más complicada en base a este punto de vista".

No es la primera vez que Carlos Sainz y Daniil Kvyat comparten equipo, y la última vez que esto sucedió, la segunda mitad de temporada del ruso fue muy buena; tanto que esa evolución permitió a Kvyat llevarse el título de GP3. 

"Siempre lleva un poco de tiempo recuperarse mentalmente, calmarse, olvidar la decepción, resetear todo y empezar de nuevo con un buen nivel y mejorar. No es de un día para otro", ha explicado Tost. "Es autoestima lo que necesita [Kvyat]. Una vez la tenga de vuelta, todos sabemos que será rápido y luchará por puntos". 

El jefe de Toro Rosso también ha tenido palabras para explicar el ambiente que se vivió en Australia a principio de año, aclarando lo ocurrido con Max Verstappen. El holandés se enfadó tras una parada no programada de Carlos Sainz.

"En Australia terminamos decepcionados por la forma de desarrollarse los hechos, que fue una tontería", recuerda el sexagenario. "Carlos tuvo un problema bajo coche de seguridad con bloquear neumáticos, y tuvo muchas vibraciones. Le tuvimos que hacer parar por seguridad, con lo que Max pensó que queríamos hacer el 'undercut'. Entonces vino y se quejó '¡ey, chicos, venga ya!'".

Esa decisión provocó que ambos Toro Rosso lucharan por la novena posición a final de carrera, diluyéndose así la quinta plaza en potencia que tenía Verstappen en sus manos.

"Max hubiese terminado en quinta posición tranquilamente, porque estaba por delante. Pero esto es parte del proceso de aprendizaje. No puedes esperar que todo sea tranquilo con dos pilotos jóvenes en el equipo", ha concluido.