King admite que su aportación ha sido vital

Stephen Fitzpatrick, el inversor que ha salvado Manor Marussia

04/03/2015 20:01

Por fin se ha confirmado una de las noticias que todos esperábamos. Manor Marussia estará en la parrilla del Gran Premio de Australia después de la intervención de un inversor que ha salvado a la escudería de su desaparición.

El buen samaritano no ha sido otro que Stephen Fitzpatrick, natural de Irlanda del norte y fundador de la compañía energética Ovo en 2009. Fitzpatrick, de 37 años de edad, ha recibido la ayuda de Justin King, exdirector general de Sainsbury, una de las cadenas de supermercados más grandes del mundo.

Ahora, ha inyectado 41 millones de euros de su bolsillo para devolver a la vida Manor Marussia. A finales de mes recibirán 38 millones de euros en concepto de premio económico por la novena posición en el Mundial de Constructores, cifra que ayudará a la supervivencia de una escuadra cuyo presupuesto anual será de 82 millones de euros, según datos revelados por el rotativo The Telegraph.

Gracias a la inyección de capital, Manor ha podido preparar sus coches en la antigua base de Dinnington, y, según Graeme Lowdon, estos pasarán los crash-test esta misma semana. "Se trata de un concepto de coche con un alto grado de lo llevado a cabo en 2014 pero con las actualizaciones en materia de seguridad de 2015", ha declarado.

Por su parte, Fitzpatrick ha querido destacar la agonía sufrida por la formación británica durante este invierno, y ha señalado que cuando Lowdon recurrió a su ayuda, el equipo apenas tenía esperanzas.

Fitzpatrick: Se nos presentó un panorama plagado de desafios, pero la historia de Marussia era muy bonita para acabar aquí

"Fue una de esas situaciones en las que necesitas más tiempo para entender todo, por lo que parecía demasiado tarde, sin posibilidades reales de revivir el equipo. Se nos presentó un panorama muy complejo, con muchos retos legales y financieros y, ahora, en tan sólo 10 días estaremos en Melbourne con una plataforma empresarial sólida sobre la que operar".

"Pero resultaba irónico que, tras aguantar durante cinco duros años, se quedaran sin fuerzas tras conseguir la novena posición en el campeonato el año pasado y alcanzar el primer peldaño para alcanzar la estabilidad financiera, si es que eso existe en la F1. Era una historia muy buena para acabar ahí".

"Tras hablar con Graeme, quien fue muy directo y con el que tuvimos varias discusiones muy francas, sólo contábamos con una larga lista de desafíos, en la que lo más importante era restablecer la credibilidad con los proveedores principales, como Ferrari. Para mí, Justin King ha sido una ayuda enorme a la hora de sortear obstáculos, especialmente porque esta es la primera compañía que compro".

King, por su parte, ha confirmado que su rol en el equipo es temporal y que ayudará a sentar las bases  para buscar a un jefe a tiempo completo antes de tomar una postura alejada de la dirección del equipo.

"Sé por los cinco años que he estado en Sainsbury que, con la gente adecuada, los valores adecuados y el trabajo duro puedes transformar un negocio. En Graeme y John tenemos estos valores y confío plenamente en que podemos ayudar a Manor a ser competitivos en la máxima categoría automovilística".

El trabajo realizado por estos dos últimos hombres ha sido encomiable y, a pesar de que el público puede no llegar a comprender el esfuerzo invertido durante el último invierno para mantener a la compañía a flote, ambos han removido Roma con Santiago para hacer fructificar las negociaciones, especialmente con los acreedores, cuya deuda ascendía a un total combinado de unos 54 millones de euros. El duro trabajo dio como resultado la salida de Marussia del concurso de acreedores en el que se encontraba, situación alcanzada también gracias a la ayuda de Ferrari.

King: Este equipo no se hubiera salvado sin la aportación de Fitzpatrick

"Los últimos meses han sido una montaña rusa. Es importante decir que para volver a competir hemos disfrutado de muchísimos apoyos por parte de FIA, FOM, Bernie Ecclestone, nuestros proveedores y el personal, con muchos de ellos volviendo a la empresa".

"Tengo que dar las gracias en particular a Stephen, que, aunque siente pasión por el deporte, tiene además un gran pasión por los desafíos empresariales. Su motivación es la de resolver problemas, y me ha impresionado su habilidad haciéndolo. Este equipo no se hubiera salvado sin su aportación".

Ahora sólo falta ver quién guiará a los coches de la escudería británica a lo largo de 2015. Will Stevens fue confirmado como primer piloto de la formación, lo que supondrá su vuelta al Gran Circo después de la breve incursión que vivió en Abu Dabi el año pasado tras competir con Caterham.