Ricciardo sobre Vettel: "Demostró que todo el mundo es humano"
El 2014 ha sido el año en el que la Fórmula 1 ha conocido a Daniel Ricciardo. Sí, llevaba en ella desde hace tres años, cuando a mitad de 2011 dejó de ser el tercer piloto de Toro Rosso para pasar a ser titular con HRT, pero ha sido esta temporada cuando nos hemos dado cuenta de lo que es capaz de hacer el australiano con un buen coche. Ser el único en romper la hegemonía de victorias de Mercedes, por tres veces, será uno de sus mayores hitos de su carrera.
El próximo campeonato tendrá que dar otro paso al frente para erigirse como líder de Red Bull tras la marcha de Sebastian Vettel rumbo a Ferrari. Daniel habla del complicado Mundial del alemán, ese que ha mostrado sus debilidades: "Básicamente, creo que demostró que todo el mundo es humano y, con lo que voy a decir ahora de ninguna manera quiero faltarle al respeto, pero, obviamente, la gente puede tener días de descanso y puede tener dificultades".
No quiero faltarle al respeto, pero la gente puede tener días de descanso y dificultades
El tetracampeón llegaba a la nueva era de unidades de potencia híbridas acostumbrado a ganar y se ha ido de su primer año con la victoria simplemente como un recuerdo. En 2013 sumó nada menos que trece triunfos, los nueve últimos, desde Bélgica hasta Brasil, de forma consecutiva. Y este año lo acaba con el saco vacío. De tanto a tan poco. Por eso, el que ha sido su compañero se alegra en cierto modo de verle sufrir en la pista después de tanto sonreír.
Sin embargo, no resta mérito a lo que ha conseguido en su carrera, porque solo con un coche demoledor no basta para ganar tanto: "El año pasado la gente se cuestionó si era humano. Ganó todas las carreras tras el verano y sí, el coche era bueno, pero tú todavía tienes que producir. Tienes que obtener el resultado, hacer una buena salida y todo lo demás, y no dejaba de hacerlo. Así que fue agradable ver que cometió algunos errores".
En 2013 ganó todo tras el verano y sí, el RB era bueno, pero tú aún tienes que producir
A pesar de que Seb difícilmente sacará algo positivo de este año, Ricciardo sí reconoce haber aprendido ciertas cosas del alemán, como la influencia que se ganó en la escudería de Milton Keynes: "Creo que la forma en la que habló con los ingenieros, la forma en que acaparaba gente a su alrededor, era duro pero justo. Así que creo que tenía el respeto de mucha gente y que ellos sabían lo que quería y lo que necesitaba, así que es agradable".
"Creo que en este deporte hay que ser un poco duro, pero siempre hay que mostrar ese poco de respeto que hace que la gente aprecie lo que estás tratando de decir, entonces eso es bueno", razona el australiano. Esa será la tarea que tendrá que hacer a partir de ahora al asumir el liderazgo, formar equipo en torno suya para intentar dar guerra a los Mercedes. El trabajo en el asfalto ya ha demostrado que puede aprobarlo con nota.
