Mismo contratiempo que el año pasado

Problemas de frenos impidieron que Rosberg atacase a Hamilton

Carles Sagalés

08/06/2015 17:16

Un año más tarde, y tras el aviso del GP de Baréin, la historia se repitió. Problemas de frenos impidieron que Rosberg lanzase un ataque para disputarle la primera posición a Hamilton. Pero Lewis tampoco tuvo una carrera sencilla. Ni mucho menos. Él también tuvo problemas, en esta ocasión con el combustible y tuvo que sacar la calculadora en cada una de las vueltas. Fue una carrera realmente estresante desde el muro de boxes.

"Es un circuito muy duro con los frenos, y de hecho hay una fina línea entre dejar que los chicos compitan y hacer que el coche sobreviva", señalaba el director ejecutivo Toto Wolff. "Hubo un momento en el que estábamos a 30 segundos de Bottas, pero aparecieron los problemas en los frenos y estábamos en el límite del uso de combustible. Eso impidió a Nico acercarse lo suficiente a Lewis como para intentar el adelantamiento".

Nico sabía que solo podría adelantar a Lewis si cometía un error

Unos problemas en el sistema de frenado que se fueron agravando con el paso de las vueltas, y el coche de seguridad que hubiese ayudado a que esa temperatura descendiese no apareció, algo realmente sorprendente en un circuito como el canadiense donde rara vez eso no ocurre. "Los frenos siempre fueron un problema, quisimos ayudarles a gestionarlos para que hubieran podido luchar en las diez últimas vueltas", asegura. 

"Les avisamos que los frenos estaban funcionando bien, pero cuando Nico apretó, los problemas aparecieron de nuevo. A partir de ahí, sabía que solo podría adelantar a Lewis si cometía un error ya que iba a ser muy complicado pasarle. Después de la primera parada de Nico los frenos estaban en peligro, con temperaturas muy, muy elevadas. Para nosotros, los frenos han representado un mayor problema que el combustible".

El resultado es satisfactorio teniendo en cuenta lo que pasó en Mónaco

Por otro lado, el fantasma de Mónaco asomaba la cabeza por los dominios de Mercedes a la espera de cometer un aparente error como el que sufrió en sus carnes el británico. Allí, un error de cálculo de poco más de un segundo le impidió ser primero para acabar siendo tercero. Así que, para los de Brackley era vital acabar la carrera sin problemas que volvieran a alimentar los rumores a los que han estado sometidos.

"Ha sido complicado manejarlo para el equipo, hemos sido expuestos a críticas de forma masiva. Parecía que todas las victorias y los campeonatos logrados se hubiesen esfumado de la ncohe a la mañana y que un puñado de idiotas estuviesen dirigiendo al equipo. Así que el resultado es satisfactorio teniendo en cuenta lo sucedido en Mónaco", concluye Wolff.