Maldonado: "Aún no he tenido un F1 con el que mostrar mi talento"
El piloto de Lotus, Pastor Maldonado no está llevando la temporada como él quisiera. Sus abandonos se contabilizan casi por carreras y las veces que ha terminado no ha obtenido la cantidad de puntos deseada. En vez de analizar el porqué de esta situación, el venezolano ha preferido culpar a la prensa de su mala imagen afirmando que "sólo buscan malas noticias contra él".
"En la F1 de estos días es complicado encontrar algo noticioso. Los que ganan siempre son los mismos, no es como hace 10 años que había más batalla y por lo tanto más noticias. Por ello, los periodistas buscan noticias donde no las hay", argumenta el venezolano, quien reconoce que su llegada a la Fórmula 1 fue motivada por el apoyo económico de una petrolera en Venezuela, pero afirma que su mérito también está ahí.
Estoy seguro de que con un coche que me permitiera ganar, como un Mercedes, ganaría
"Ellos me apoyaron, sí, pero al igual que hace por ejemplo Red Bull con su programa de formación. Al principio era una enorme presión, sentía que solo corría porque invertían por mí, pero he aprendido a vivir con ello, aunque todavía me siento infravalorado porque no he tenido un coche con el que pueda demostrar mi talento. Algunos de mis compañeros no merecen estar en la Fórmula 1, yo he demostrado que sí", afirma tajante Pastor en Globo.
Cuando le preguntaron si podría ganar carreras al volante de un Mercedes, el piloto, que acaba de cumplir los 30 años, insistió: "Estoy seguro que con un coche que me permitiese ganar, ganaría fijo". Con respecto a su futuro, el sudamericano no las tiene todas consigo, ni su propio equipo lo tiene claro. Quizá el futuro de Lotus vuelva a relacionarse con el de Renault. A pesar de todo, y sea donde sea, Pastor se ve en la Fórmula 1.
"No lo sé, es difícil saber si estaré aquí o en otro equipo. Espero que sea aquí en Lotus, porque tenemos un muy buen ambiente y me siento muy bien con ellos, pero en la F1 se puede esperar cualquier cosa", concluye Maldonado.
