Libertad y cero presión, claves de Toro Rosso-Honda, según Key
Una de las grandes sorpresas positivas de la pretemporada 2018 ha sido la fiabilidad del motor Honda, después de tres años de frustración con McLaren. Tras la unión con Toro Rosso, parece que los japoneses han encontrado la clave para hacer que su unidad de potencia resista, aunque persiste la incógnita sobre su rendimiento.
El director técnico de Toro Rosso, James Key, ha admitido que Honda ha hecho una mejora sustancial respecto a la temporada pasada y una de las claves ha sido darles libertad absoluta para su diseño. "Para nosotros, la sorpresa no es tan grande", ha asegurado Key en una entrevista para la publicación alemana Auto Motor und Sport.
"Durante nuestras visitas a Japón y Milton Keynes, notamos de inmediato la gran capacidad que tienen. Algunos de sus problemas los eliminaron ya en 2017. Honda ha puesto un gran énfasis en la correlación entre el banco de pruebas y la pista para 2018", ha agregado.
"Dejamos toda la libertad a Honda, sin preocuparnos por el impacto en el chasis. No queríamos presionarlos. No sé cuánto ha mejorado Renault, pero no estamos lejos respecto a lo que estábamos acostumbrados en 2017", ha señalado.
El gran temor de la escudería de Faenza era el poco tiempo que tenían para diseñar el chasis, ya que no conocieron que tendrían el nuevo motor Honda hasta el mes de septiembre de 2017. "Normalmente se empieza un nuevo proyecto en diciembre o en enero del año anterior, así que estábamos bastante atrasados. Sabíamos que el motor es bastante diferente al de Renault", ha comentado.
"Cuando se confirmó el acuerdo, nos sentamos a discutir los requisitos del motor y cómo podríamos continuar mejor el diseño del coche con el motor nuevo", ha añadido.
El retraso del anuncio provocó que todo el equipo trabajara a ciegas de cara a la temporada 2018, no obstante, han conseguido llegar a tiempo y con fiabilidad. "Nuestros diseñadores se basaron en los datos sin procesar que aportó Honda", ha recalcado.
"Siempre les gustaría tener más tiempo para diseñar el coche en torno a la nueva arquitectura del motor, especialmente porque nos podemos coordinar directamente con Honda. A pesar del retraso, podemos hacer planes de manera rápida y trabajar de manera efectiva", ha asegurado.
"Tuvimos que hacer cambios. La caja de cambios y la suspensión trasera son nuevas. Tuvimos que adaptar el chasis. Todos estos componentes se tienen que terminar durante la Navidad para pasar los crash test e ir al banco de pruebas. Todo se tuvo que hacer entre septiembre y diciembre", ha expresado para finalizar.
Si quieres leer más noticias como ésta visita nuestro Flipboard
