Horner insta a la FIA a imponer por la fuerza el techo presupuestario
Jean Todt prepara una ofensiva final por el techo presupuestario de la Fórmula 1, un concepto que teóricamente ha de entrar en vigor a partir de 2015 para reducir los millonarios costes de la categoría reina del motor.
Poco se ha avanzado desde que a principios de mayo el Grupo de Estrategia rechazara en bloque la propuesta inicial de la FIA, pero Todt no tira la toalla y confía en que los equipos lleguen a un acuerdo antes de que termine el mes, pues cualquier consenso deberá ser ratificado por el Consejo Mundial de los Deportes de Motor en la reunión prevista para la semana del 23 de junio.
En caso de que se supere la fecha límite y aún no exista un quorum en el paddock, Christian Horner insta a la Federación a tomar las medidas que considere necesarias e implantarlas en el Reglamento de la temporada 2016 sin consultar a las escuderías.
Horner: Deberían decir cómo será la F1, y que los equipos decidan si quieren estar en el Campeonato
"Creo que el promotor (CVC) y el regulador (FIA) deberían sentarse y decir 'de acuerdo, la Fórmula 1 será de esta manera', y que entonces los equipos escojan si quieren o no quieren estar en el Campeonato", sugiere el jefe de la escudería Red Bull. "Hasta ahora puede que hayamos ahorrado unos 10.000 euros, pero vamos en la dirección adecuada".
No todo el Pit Lane es tan paciente como Horner, que gestiona uno de los equipos más ricos de toda la competición. Es el caso de Sauber, cuya frágil economía precisa sí o sí de la creación de un techo presupuestario para la próxima campaña.
"No es que queramos ser iguales, no es que queramos mejorar nuestra posición, es que lo que no queremos es que la Fórmula 1 se vea metida en una dimensión económica insostenible, no queremos que los equipos pequeños se estén preguntando constantemente si van a poder competir el mes que viene".
Éstas eran las declaraciones de Monisha Kaltenborn, la jefa del equipo de Hinwil, quien no ha dudado en asegurar que "algo va mal" si un equipo de la talla de McLaren es incapaz de dar con un patrocinador principal. "La Fórmula 1 tiene la fama de ser una máquina de consumir dinero. Ahuyenta a los patrocinadores y en 2009 ahuyentó a los fabricantes, porque perder resultaba demasiado caro".
