GP de España - Entrenamientos Libres 2

Ferrari promete guerra a Mercedes y McLaren y Sainz pisan el Top 10

Víctor Serrano
08/05/2015 15:31

Horarios decentes, el paddock convertido en una pequeña de ciudad repleta de hospitalities espectaculares, viajes más cortos para los equipos, y mejoras, una cesta bien cargada de mejoras. Así es, Europa abre sus brazos a la Fórmula 1 dando paso a la segunda etapa del Mundial, esa en la que las escuderías muestran sus primeros grandes avances de la temporada. Y visto lo visto, las batallas se apretarán en la pista y en los tiempos. Al menos, en la zona noble.

Y es que, si en China y Baréin en Mercedes consiguieron mantener una distancia de seguridad con Ferrari, al menos con el más solvente de sus coches, el de Hamilton, con el regreso de la acción en Barcelona la lucha por lo importante se ha apretado bastante. Mucho más de lo que en Brackley desearían: únicamente cuatro décimas entre Lewis y Vettel, el mejor SF15-T del viernes. Y no solo eso, a Rosberg y Räikkönen les ha separado poco más de una décima.

Arrivabene aseguró ante los micrófonos que el bólido rojo había cambiado en un 70% y las distancias con los líderes le dan la razón. Se han reducido a la mínima expresión después de que por la mañana estuvieran rondando el segundo. Y eso que se han encontrado con un asfalto complicado, poco mejor que el de esta mañana y mucho peor que el de 2014: Hamilton se ha quedado a 1.3 segundos del tiempo que consiguió el año pasado en la misma sesión.

Si la pelea por la victoria y el podio promete ser más ajustada que nunca en este 2015, la que se jugará a sus espaldas no lo será menos. Desde el quinto mejor tiempo de Kvyat hasta el undécimo de Alonso no hay ni un segundo de diferencia: únicamente unas ocho décimas. Es decir, siete pilotos en un pañuelo. Una guerra entre cuatro equipos (Red Bull, Toro Rosso, Williams y McLaren) a la que solo ha faltado Daniel Ricciardo.

El australiano ha sufrido problemas con su unidad de potencia durante todo el día y apenas ha podido rodar los últimos cinco minutos de la sesión. De haber contado con más tiempo, lo más seguro habría sido encontrarlo junto a su compañero ruso. Significativa es la mejora del monoplaza energético siempre que le respete su motor galo. De la misma forma, la evolución de McLaren también aparenta ir por el buen camino.

Han estrenado el nuevo diseño acabando con Button en septimo y Fernando al borde de pisar el Top 10 (11 milésimas con su viejo amigo Massa lo han impedido). El MP4-30 se mostró más nervioso que nunca, sobrevirador al máximo, pero es cuestión de que se vaya acostumbrando a la mayor entrega de potencia de su propulsor Honda. Sabemos de lo engañoso que puede ser el primer día, pero aquí sí deberían luchar por colarse en la Q3.

No hay lugar más apropiado para romper esa nefasta estadística para Alonso y su equipo que ante su afición. Y, ¿qué habría mejor que tener a un piloto español entre los diez mejores? Tener a dos. A diferencia de su amigo y referente, Carlos Sainz ya lo ha hecho en el primer día en el Circuit. Cierto que finalizando noveno a tres puestos y seis décimas de Max Verstappen, pero con la certeza de que, a pesar del desarrollo más lento del Toro Rosso, podrá estar ahí.

Entre toros y bólidos negros que estrenan look, aparece el blanco impoluto de los Williams. Lejos de afianzarse como tercer mejor equipo, Bottas y Massa se ven inmersos en medio de un pelotón considerable de rivales. Pero solo es viernes y los de Grove suelen ir de menos a más según avanza el fin de semana. A los que les pilla algo más lejos esa lucha por los puntos es a Lotus. Parece que su objetivo de ponerse a la altura de Red Bull y Williams tendrá que esperar.

Además, uno de los coches de Enstone, el de Grosjean, ha protagonizado la imagen del día al desprenderse parte de la cubierta de su motor de forma espontánea, haciendo perder el francés la mitad de la sesión. Pero, para perdidos, unos Sauber y Force India muy retrasados. Escasean las mejoras en esa zona. Cerrando la tabla Merhi, que tendrá difícil sonreír en su tierra. Los que más lo harán estarán arriba, pero quiénes, ¿alemanes o italianos? La lucha está servida.