Newey analiza el "peligro" del límite de presupuesto: "La F1 solía ser la disciplina de ingeniería mejor pagada"
Adrian Newey ha analizado las consecuencias del límite presupuestario. A su juicio, no todo son ventajas, y es algo que ha podido ir repercutiendo en los equipos técnicos. El diseñador de Red Bull ha confirmado que la Fórmula 1 ya no es la mejor posicionada a la hora de atraer a jóvenes talentos recién salidos, por ejemplo, de las universidades. Antes, ha asegurado, la competición "solía ser la disciplina de ingeniería mejor pagada del mundo". Y eso llamaba también la atención. Sin embargo, ahora parece que han tenido que cambiar de estrategia.
Los equipos deben mantener un cierto grado de control a la hora de gastar el dinero desde que el límite de presupuesto hizo acto de presencia en la competición. Es una forma de mantener los costes bajo control y que los diez equipos, en la medida de lo posible, igualen sus condiciones. Fue ya en la temporada 2021 cuando se introdujeron estas nuevas medidas y, tres años después, las escuderías y sus integrantes empiezan a ver las consecuencias. Pero, sobre todo, tienen el material suficiente como para analizar las diferencias con el pasado.
"Creo que el peligro oculto del límite de costes, que probablemente ninguno de nosotros pensó realmente cuando entró por primera vez, es que la Fórmula 1 solía ser la disciplina de ingeniería mejor pagada del mundo", ha explicado Newey en una entrevista con Racing News 365.
"Por lo tanto, podríamos contratar y atraer de las universidades a los jóvenes graduados más brillantes, y ahora con el límite de costes, con la cantidad de inflación y el límite de costes que no aumenta con la inflación, ese ya no es el caso", ha lamentado.
La forma de igualar las condiciones entre equipos ha hecho, en consecuencia y de acuerdo con la opinión del diseñador, que hayan perdido cierto protagonismo fuera de la F1. Es decir, ahora ya necesitan que los nuevos talentos se abran paso en la competición gracias a su 'pasión' por la misma, y ya no tanto por el dinero que se les pudiese ofrecer. Pero tampoco parece que la tendencia vaya a cambiar. No, al menos, a corto plazo.
"Al mismo tiempo, es un arma de doble filo, ya que también tenemos empresas tecnológicas de nueva creación que ofrecen salarios muy altos, por lo que ahora, cuando vamos a las universidades a intentar atraer a licenciados, ya no somos los mejores", ha apuntado.
"De igual modo, con el personal que ya tenemos, estamos perdiendo gente que se va a las empresas tecnológicas, lo que es un verdadero problema porque nos dificulta, como industria, y no sólo a nuestro equipo, atraer a los mejores ingenieros del mundo", ha añadido para después completar: "Intentamos atraerlos por su pasión y no sólo por los mejores sueldos".
