IndyCar

Ericsson gana una carrera de eliminación en St Petersburg; Palou, octavo

05/03/2023 21:00

Adelantar es virtualmente imposible en St. Petersburg, pero aún más difícil es sobrevivir a las mil y una trampas que albergan sus 100 vueltas. La carrera de este domingo, ganada por Marcus Ericsson después de que Patricio O’Ward tuviera un problema mecánico a cuatro vueltas del final, es una buena muestra de ello. Pato parecía llamado a ganar la carrera después de que antes los dos líderes, Scott McLaughlin y Romain Grosjean, protagonizasen un accidente nada más salir de la última ronda de paradas en boxes.

El estreno de Alex Palou en este 2023 ha sido una auténtica montaña rusa. De séptimo en parrilla a quinto al final de la primera vuelta. De ahí ha caído a noveno por culpa de una bandera amarilla caprichosa durante la primera ventana de paradas en boxes. Ha llegado a ser duodécimo en las resalidas posteriores. Ha obrado un par de grandes rearrancadas que lo han aupado a la cuarta posición, pero en la última ha tenido un desliz que lo ha relegado a la sexta y ha terminado finalmente octavo tras sufrir en las últimas vueltas.

La carrera ha estado condicionada de principio a fin por las banderas amarillas. Romain Grosjean la ha comandado con mano de hierro durante toda la primera tanda, también a través de una montonera en la salida que ha obligado a sacar la bandera roja. Pero Conor Daly ha trompeado durante la primera ventana de paradas y esto ha provocado una amarilla que ha metido a Scott McLaughlin en la primera posición. Su duelo se ha prolongado hasta después del último repostaje, cuando ambos han protagonizado un accidente. Scott había salido a pista justo delante de Romain, que había parado una vuelta antes y por ende tenía los neumáticos en temperatura. El francés le intentó un exterior en la curva 4, pero el neozelandés apuró la frenada y esto, con gomas frías, provocó que ambos acabasen contra las barreras.

Patricio O’Ward recogió entonces el testigo con su Arrow McLaren, pero a cuatro vueltas del final tuvo un problema de combustión que le costó unas preciosas décimas de segundo. Un fallo que no habría tenido más consecuencias de no ser porque Marcus Ericsson estaba justo pegado a su caja de cambios, listo para aprovechar cualquier circunstancia para adelantarle. Y eso es precisamente lo que el sueco hizo.

 

El GP de St Petersburg empezó con un accidente en cadena que no pasó del susto, pero que podría haber terminado mucho peor. La peor parte se la llevó Devlin DeFrancesco. Se quedó cruzado en la pista y recibió el impacto lateral del debutante Benjamin Pedersen, que no aminoró ante el peligro. Lo alcanzó a velocidad de carrera y lo elevó por los aires, por suerte sin consecuencias. Previamente se había generado una montonera, iniciada por un leve toque entre Scott Dixon y Felix Rosenqvist que propició que los coches que venían por detrás tuvieran que levantar. David Malukas frenó, Santino Ferrucci golpeó por detrás a Helio Castroneves y la pista se quedó bloqueada.

Los comisarios ondearon rápidamente la bandera roja para que las grúas pudieran acceder a la pista. La lista de bajas era larga, no en vano la parrilla se redujo de 27 a 22 coches. DeFrancesco pasó fugazmente por el centro médico del circuito, pero el chequeo al que se sometió no detectó ninguna lesión y a los pocos minutos ya estaba atendiendo con total normalidad a los micrófonos de la televisión nortamericana.

A todo esto, la primera salida transcurrió sin apenas sobresaltos en la parte alta de la parrilla. El único piloto que escaló posiciones fue Alex Palou, que pasó de séptimo a quinto. Romain Grosjean defendió la pole position con éxito con su compañero Colton Herta enganchado a su estela, y justo detrás Patricio O’Ward y Marcus Ericsson en el mismo lugar que ostentaban de inicio.

Tras unos minutos de interrupción por la bandera roja, la carrera se volvió a relanzar. Esta vez hubo aún menos movimiento que en la primera salida y así ninguno de los pilotos de arriba pudo hallar el modo de progresar. Encabezado por Grosjean, el tren de monoplazas rápidamente se centró en la gestión de combustible y de neumáticos, posponiendo para la primera parada en boxes cualquier intento de adelantamiento.

Para Alex Palou, esta fase del Gran Premio fue especialmente dura. Tenía velocidad, pero estaba atrapado detrás de Marcus Ericsson y no había forma de pasarle en pista. La cabeza de carrera se le alejaba a cada paso por meta, y así si en la vuelta 13 estaba a 6,6 segundos, en la vuelta 20 ya eran 9,7 y la cifra no paraba de aumentar.

Por delante, Grosjean protegió su liderato con una gestión de neumáticos inmaculada. Tan sólo Herta le pudo seguir el ritmo durante las 15 primeras vueltas, pero a partir de entonces el estadounidense se quedó sin gomas y empezó a perder terreno. De rodar a menos de un segundo, pasó a estar a 2,7 en la vuelta 20 y a caer a 6,6. Su pérdida de ritmo fue tal que incluso cayó por detrás de Patricio O’Ward, que le arrebató la segunda plaza en la vuelta 25.

El neumático rojo, el de los líderes, ya estaba al final de su vida útil. Colton Herta fue el primero en pasar por boxes, en la vuelta 28. Alex Palou vio con frustración cómo Scott McLaughlin le birló la cuarta plaza con su juego de gomas negras. El campeón de 2021 reaccionó rápidamente y en la 31 optó por pasar por boxes para montar también el compuesto más conservador. En el mismo giro pararon O’Ward y Ericsson, segundo y cuarto virtual.

El líder Romain Grosjean se pudo permitir el lujo de ver qué hacían sus rivales y reaccionar al respecto. Alargó sus neumáticos hasta la vuelta 32 y también puso un set de neumáticos negros. Regresó a la pista por delante de O’Ward y de un Ericsson que le arrebató a Herta la tercera posición virtual en todo el vaivén de paradas. Palou seguía quinto virtual.

La clasificación estaba desordenada porque aún no habían parado todos los coches que habían salido de inicio con duros. Y entonces ocurrió lo que tantas veces ocurre en la IndyCar: que hubo una amarilla caprichosa que cambió las cosas. Conor Daly trompeó y caló el motor, y a Scott McLaughlin y Scott Dixon les tocó la lotería. Ellos lideraban en ese momento y todavía no habían parado, y con esta neutralizada tuvieron la oportunidad de servir su pit-stop y reincorporarse todavía en las dos primeras posiciones.

McLaughlin y Dixon no fueron los únicos beneficiados. Por detrás, Alexander Rossi y Will Power también sacaron partido de esta misma situación. Todo esto jugó obviamente en contra de Alex Palou, que pasó de saberse quinto en la clasificación virtual a verse noveno.

La resalida de la vuelta 41 no cambió nada en las posiciones de honor, pero sí fue un nuevo mazazo para Palou, que cayó de noveno a duodécimo. También trajo consigo un nuevo y vistoso accidente en cadena, con un Rinus VeeKay que se fue contra el muro en la curva cuatro y un Kirk Kirkwood que voló por encima de él. Jack Harvey también se vio implicado. La bandera amarilla fue inevitable.

La bandera verde reapareció en la vuelta 50, pero fue igual de fugaz. Colton Herta se fue contra las barreras en la curva cuatro, tal y como VeeKay había hecho unos minutos antes, aunque en su caso fue porque Will Power le tocó desde el interior. Fuera como fuese, esto motivó una nueva amarilla y benefició de forma indirecta a Palou, que pescó en río revuelto y saltó de duodécimo a noveno.

En la siguiente resalida, ocurrida en la vuelta 55 y limpia por fortuna para todos, Palou adelantó a dos coches más para ponerse séptimo y dar continuidad a su recuperación. Por delante, Scott McLaughlin defendió la primera posición de los ataques de Grosjean y O’Ward. Dixon y Ericsson, cuarto y quinto respectivamente, rodaban delante de un Rossi que servía de enlace con el mismo Alex.

La carrera entró entonces en una fase de tensa espera hasta la última parada. Scott McLaughlin y Romain Grosjean volaban en solitario, y así apenas 0,8 segundos los separaban al llegar a la vuelta 65. Patricio O’Ward completaba el podio a 2,8 segundos, seguido por Dixon a 3,9, Ericsson a 4,5, Rossi a 6,4 y Palou a 6,9 segundos.

Alex Palou fue el primero en mover ficha. El español montó el compuesto duro en la vuelta 66. Su compañero Dixon le siguió en el siguiente giro. O’Ward aguantó hasta la 70 y salió justo delante de los Ganassi, mientras que Grosjean y Ericsson lo hicieron en la 71. El líder McLaughlin aguantó una más y entró en la 72, con tráfico por doblados y la presión de saber que Romain podía arrebatarle la victoria.

McLaughlin desactivó el limitador a la vez que Grosjean negociaba la primea curva del circuito. Los siguientes 20 segundos fueron de infarto. Scott se mantuvo en cabeza por apenas un par de metros, pero Romain tenía los neumáticos en temperatura y sabía que sólo tenía una oportunidad. Le pisó los talones a través de la curva tres, cogió la línea exterior en la siguiente recta e intentó un exterior en la curva cuatro. McLaughlin apuró la frenada, pero tenía las gomas frías y no pudo trazar como quería. Resultado, un accidente doble entre los dos primeros coches.

Palou ganó tres posiciones, de séptimo a cuarto, entre el doble accidente de los líderes y una penalización a Will Power por el incidente anterior con Colton Herta.

Patricio O’Ward heredó el liderato y lo defendió con uñas y dientes en la siguiente resalida, que fue en la vuelta 80. De hecho, el mexicano de McLaren fue tan rápido que a lo largo del siguiente giro abrió un hueco de más de dos segundos sobre Marcus Ericsson, su más inmediato perseguidor. Alex Palou cedió dos plazas y cayó de cuarto a sexto.

Con el paso de las vueltas, sin embargo, O’Ward perdió algo de inercia. El mexicano acabó acusando el alto ritmo que había impuesto de inicio y poco a poco vio cómo Marcus Ericsson se hacía grande en sus retrovisores. Los dos entraron en las diez últimas vueltas separados por menos de un segundo. Parecía que el mexicano podría resistir, pero al final de la vuelta 96 tuvo un problema de combustión que le costó unas preciosas décimas de segundo. Eso fue todo lo que necesitó Ericsson para adelantarle y llevarse la primera victoria del año en St. Petersburg.

 

RESULTADOS CARRERA ST PETERSBURG 2023

POS. PILOTO EQUIPO TIEMPO V.
01. M. Ericsson Chip Ganassi Racing 2:05'30"7907 100
02. P. O'Ward Arrow McLaren +2"4113 100
03. S. Dixon Chip Ganassi Racing +2"9257 100
04. A. Rossi Arrow McLaren +6"7689 100
05. C. Ilott Juncos Hollinger Racing +8"2650 100
06. G. Rahal Rahal Letterman Lanigan +10"7671 100
07. W. Power Team Penske +11"6798 100
08. A. Palou Chip Ganassi Racing +14"7244 100
09. C. Lundgaard Rahal Letterman Lanigan +14"9528 100
10. D. Malukas Dale Coyne with HMD +15"4401 100
11. M. Armstrong Chip Ganassi Racing +15"8049 100
12. A. Canapino Juncos Hollinger Racing +28"1332 100
13. S. McLaughlin Team Penske +1 vuelta 99
14. C. Daly Ed Carpenter Racing +1 vuelta 99
15. K. Kirkwood Andretti Autosport +3 vueltas 97
16. S. Robb Dale Coyn with RWR +4 vueltas 96
17. J. Newgarden Team Penske +5 vueltas 95
18. R. Grosjean Andretti Autosport Abandono 71
19. F. Rosenqvist Arrow McLaren Abandono 51
20. C. Herta Andretti Autosport with Curb-Agajanian Abandono 49
21. R. VeeKay Ed Carpenter Racing Abandono 41
22. J. Harvey Rahal Letterman Lanigan Abandono 41
23. H. Castroneves Meyer Shank Racing Abandono 0
24. S. Ferrucci AJ Foyt Enterprises Abandono 0
25. D. DeFrancesco Andretti Steinbrenner Autosport Abandono 0
26. S. Pagenaud Meyer Shank Racing Abandono 0
27. B. Pedersen AJ Foyt Enterprises Abandono 0