Glickenhaus, el sueño de un millonario apasionado
Jack Glickenhaus y James Cameron han hecho fortuna con el cine, donde todo es ilusión y cualquier cosa puede convertirse en realidad.
Pero ambos, además, son grandes apasionados por el mundo del automóvil —la colección de Glickenhaus puede que no sea muy amplia, pero es espectacular—. Así que, ilusión y competición tienen un objetivo: Le Mans.
Glickenhaus, cuyo padre fue fundador de la más importante agencia de bolsa de Wall Street, era vecino de Luigi Chinetti, importador de Ferrari en Estados Unidos y dueño del equipo NART. Asistió a la mítica victoria de Ferrari en Daytona, con los tres P4 entrando juntos en meta y desde entonces sintió pasión por la marca, hasta el punto de hacerse construir por Pininfarina un Ferrari denominado P4/P5 inspirado en el mítico P4, una belleza, obra maestra… pero Luca Montezemolo, que había permitido que tuviera el nombre de Ferrari, le impidió comercializar una pequeña serie de este modelo.
Glickenhaus llegó a realizar una versión de competición que corrió habitualmente en Nürburgring, lo que le llevó a encargar el diseño de un coche propio. Con las reglas de Hypercar y teniendo previsto el lanzamiento de algunos modelos muy exclusivos de serie, vio el momento de crear una marca con ‘pedigree’ de competición.
Los dos socios decidieron embarcarse en una aventura que ha ido a más hasta construir el Glickenhaus SCG 007 LMH. Encarnan la pasión pura por la competición, que siempre ha sido un gran motor para la resistencia, y el espíritu del constructor artesanal.
Un equipo absolutamente privado, que lo ha realizado todo, incluido el motor. Éste ha sido realizado por el especialista francés Pipo, un V8 de 3,5 litros basado en dos motores de 4 cilindros, con unos 680 caballos en total. No tiene sistema híbrido.
No han querido hacer un coche revolucionario, sino eficaz y fiable. Sus medios no son los de una gran marca, obviamente, pero no han estado tan lejos de Toyota en 2022. Es más, en Monza hicieron la pole y no pudieron haber ganado.
Su presencia en se centra en un sólo coche, sus finanzas son obviamente limitadas. Romain Dumas, Ryan Briscoe y Olivier Pla son sus pilotos para Sebring. Para Le Mans tendrán dos coches, quizás también en Spa.
