VLF Destino: El karma nos regala un motor V8
La dramática situación de Fisker Automotive y que terminó en bancarrota del fabricante tuvo negativas consecuencias, pero también dos puntos positivos. El primero fue la creación de Karma Automotive tras la inyección económica del grupo chino Wanxiang y por ende la vuelta a la vida del Fisker Karma. El segundo fue el inicio de un proyecto paralelo que tres años después ha visto la luz.
Hablamos del VLF Destino, un superdeportivo basado en el Fisker Karma y que fue creado bajo la supervisión de Bob Lutz, Gilbert Villarreal y Henrik Fisker, antiguo CEO de la marca y que abandonó el proyecto cuando el barco ya hacía aguas. Sea como fuere, este nuevo modelo nace desde un concepto muy distinto y su primera unidad ya tiene precio. Si quieres hacerte con el primer VLF Destino fabricado tendrás que desembolsar 229.000 euros. ¿Y a qué se debe este precio?
Está claro que la exclusividad se paga y el VLF Destino es un claro ejemplo, muy a pesar de su diseño exterior. Y es que delante de nosotros tenemos un Fisker Karma al que se le han hecho ligeras modificaciones estéticas. Un nuevo paragolpes delantero con una parilla rectangular y diseño diamantado, un renovado grupo óptico LED oscurecido, un nuevo difusor y unas llantas de aleación de 10 radios con acabado en color negro nos intentan hacer olvidar el modelo original, con el que comparte incluso las ópticas traseras.
Sea como fuere, la gracia del VLF Destino está bajo el capó, ya que en su interior se esconde un motor V8 sobrealimentado con una potencia de 638 caballos y 819 Nm de par. Este propulsor es idéntico al que monta el Chevrolet Corvette C6 ZR1 y está asociado a una nueva y trasera transmisión. Este bloque motor dista en gran medida del motor 2.0 ECOTEC de 240 caballos que asociado a dos propulsores eléctricos entregaba 403 caballos en el Fisker Karma original. ¡Viva la deshibridación!
