Sale a subasta en Australia una matrícula por más de 6,5 millones de euros
¿Pagarías varios millones de euros por un número de matrícula exclusivo? ¿Pagarías bastante más de lo que cuesta el mejor hypercar del momento?
En España esto no es posible, pero en otros países es normal solicitar una placa de matrícula personalizada. Incluso si esa matrícula ya pertenece a alguien, es posible llegar a un acuerdo y comprársela.
Y esto es lo que sucederá en Nueva Gales del Sur, en Australia, donde sale a subasta el número NWS 1, la primera matrícula emitida por el estado, que data de 1910.
Por el momento, la puja ya ha superado el listón de los 10 millones de dólares australianos, unos 6,5 millones de euros, que quintuplica el precio más alto pagado hasta ahora en Australia por un número de matrícula.
¿Mercado de placas de matrícula? Pasa un poco con los dominios de Internet. Unos apenas valen nada –las tasas– y otros tienen un cierto precio por diversos motivos.
En algunos países, la placa de matrícula está ligada al propietario. Y este puede ir traspasándola de un vehículo a otro, tras el papeleo administrativo correspondiente; el número es de por vida e identifica al propietario. Eso sí, sólo le sirve para un coche, el que haya elegido. Si se desprende del coche tiene la potestad de conservar la placa y transferirla a otro automóvil, mientras el nuevo propietario del vehículo debe tramitar su nueva matriculación o aprovechar una placa que ya sea de su propiedad.
Pero hay algunas matrículas que despiertan un interés especial y alcanzan precios astronómicos, se subastan como si de un automóvil clásico cotizado se tratara. En ocasiones estas subastas las ha llegado a realizar los entes oficiales correspondientes en el momento de lanzarlas.
La matrícula NSW 1 fue otorgada en 1910 al coche del primer comisionado de la policía del Estado. En 1930 fue adquirida por un magnate ferroviario, propietario de una compañía de autobuses y fundador de la línea aérea ANA, que falleció en 1961.
Se dice su viuda rechazó la oferta de 200.000 dólares por ella, puesto que la usaba en su Ford Fairmont. Al fallecer ésta, la placa había sido conservada por la familia –en Australia pueden formar parte del legado– hasta que ahora ha salido a subasta.
Oficialmente, el récord por una placa de matrícula se batió a primeros de este año en Dubái, cuando se han pagado más de 15 millones de dólares por la matrícula ‘7’. Batió el récord de la placa ‘F1’ en Reino Unido, que era propiedad de Afzal Kahn, fundador y propietario Kahn Design, quien la había adquirido años antes por sólo 440.000 libras, y salió a subasta por 12 millones de libras –13,6 millones de euros–, aunque con los impuestos el comprador debía pagar unos 15 millones de euros. ¡Ni el oro se revaloriza tanto!
