CONDUCCIÓN EN RUSIA

Los milagros existen: nadie muere en este accidente

10/08/2016 13:40

Hay miles de accidentes en Rusia y no publicamos prácticamente ninguno. Éste, sin embargo, es tan impresionante que merece que todos lo veamos. Todo surgió de una enorme imprudencia, pero milagrosamente nadie murió en el impacto.

El accidente que os presentamos hoy y su vídeo puede afrontarse como un simple ejercicio de morbo, como un ejemplo de lo que no hay que hacer al volante o como lo más cercano a un milagro que hayamos visto en mucho tiempo.

El accidente se registró el pasado día 6 en la carretera 41A-002, que une las ciudades rusas de Vólosovo y Gátchina, a unos 40 kilómetros de San Petersburgo. Grabado desde un coche que viaja a unos 90 kilómetros/hora, la escena es simplemente brutal.

En medio de una larga recta, un Lada 110 negro y rebajado en altura supera a unos 130 kilómetros/hora al coche que graba la escena. Es un adelantamiento muy apurado porque llega de frente un pequeño camión. Lo que sorprende al conductor del apresurado Lada es que, cuando intenta volver a su carril, allí circula a baja velocidad lo que parece un viejo Lada 1200. Por un momento trata de corregir la trayectoria y pasar entre el camión y el Lada 1200, pero la fuerte frenada con el volante girado hacia la izquierda provoca el deslizamiento de la trasera hacia la derecha, así que el imprudente se cruza sin remedio frente al camión, que no logra esquivarlo.

A partir de ese momento, es mejor no describir lo que vemos. Cuesta mucho creer que haya supervivientes después de un impacto de esa fuerza en el que los ocupantes del coche infractor no llevaban puesto el cinturón de seguridad. Además, el vehículo está en las Antípodas de los estándares de seguridad actuales. De ningún modo podría vaticinarse no sólo que habría algún superviviente, sino que nadie iba a morir en esta melé.

Por supuesto, cinco personas tuvieron que ser ingresadas en el hospital con múltiples lesiones. En el interior del Lada 110 había tres hombres de 19, 20 y 26 años, además de una mujer de 21, y todos acabaron con varias fracturas y daños en la cabeza, pero con vida pese a salir despedidos del coche con una inusitada violencia. Por su lado, el conductor del camión sólo sufrió pequeñas heridas y contusiones.