Aston Martin AMR-C01: el simulador más lujoso del mundo
El Aston Martin AMR-C01 es un completo y lujoso simulador que pone a la venta la firma británica por un precio que de unos 62.000 euros al cambio más impuestos. Tan sólo se van a fabricar 150 unidades y tiene como base el Assetto Corsa.
El mundo de los eSports está en un constante auge. Tanto que los diferentes fabricantes de automóviles empiezan a dedicarle cada vez más atención. Sin embargo, al menos hasta ahora, nadie había llegado tan lejos como Aston Martin. ¿Que sus coches son lujosos? Pues su simulador oficial también ha de serlo. Se llama Aston Martin AMR-C01 y tiene un precio de 57.500 libras impuestos aparte, lo que al cambio actual son unos 62.000 euros, una cifra sideral en la que sin duda influye un proceso de fabricación que se lleva a cabo totalmente a mano.
Tan sólo se van a producir 150 unidades del Aston Martin AMR-C01, cuyo asiento se inspira en el del Aston Martin Valkyrie. Su parte frontal está diseñada para alojar una parrilla similar a los de la firma de Gaydon. Y todo sin dejar de comentar que muchas de sus piezas están hechas en fibra de carbono. En su concepción ha tenido voz y voto Darren Turner, piloto oficial de la marca.
El desarrollo de lo que se ve en pantalla ha sido algo conjunto entre Aston Martin y Curv Racing Simulators, que han tomado como base uno de los simuladores más populares entre los conductores virtuales, el Assetto Corsa.
"Ha sido todo un desafío para nuestro equipo de diseño ya que, aunque el simulador no es un automóvil en sí mismo, está completamente inspirado en nuestros auténticos modelos de competición. El AMR-C01 tenía que ser igual de elegante, con las líneas dinámicas y ese equilibrio de proporciones que emparenta a cualquier Aston Martin con su prestigioso linaje. Para mí el AMR-C01 es casi más una escultura que un simulador, entendido ésta como una verdadera obra de arte", ha declarado Marek Reichman, el director creativo de Aston Martin.
A pesar de que pueda parecer lo contrario este simulador no es el más caro de la historia. Hace años se supo que Fernando Alonso contaba con uno en su casa que rozaba los 300.000 euros por cortesía de Ferrari. Existen además diversas empresas especializadas que montan máquinas prácticamente a la carta que, en ciertos casos, pueden llegar a superar el coste del que ahora pone a la venta Aston Martin.
