Los récords caen, los adelantamientos llegan

11/04/2017 08:30

En Shanghái, ya sea por la lluvia o por la anchura del circuito o por la longitud de las rectas, la acción fue trepidante y hubo adelantamientos en pista. Y no precisamente se debieron al DRS sino que en ocasiones fueron propiciados por el propio trazado gracias a un par de zonas de curvas empalmadas, largas y tortuosas, donde era posible la entrada de dos coches en paralelo.

Y por supuesto, los dos espectaculares adelantamientos de Sebastian Vettel a los Red Bull se llevan la palma. Especialmente el que realizó a Daniel Ricciardo.

"Cuando vi que Daniel protegía el interior del viraje decidí intentarlo por la izquierda frenando más tarde. Lo rebasé y entré; afortunadamente él no bloqueó sus ruedas porque no había mucho espacio y aunque me abrí un poco más nuestras ruedas llegaron a tocarse. Me aparté más y llegué a poner dos ruedas en la tierra, pero pude salir airoso", explicó Vettel. En el caso de Max Verstappen, el joven holandés ayudó involutariamente al blocar sus ruedas.

Es posible que el efecto de la lluvia y lo poco que se rodó el viernes hicieran que hubiera poca goma depositada en el asfalto. Este factor es clave para que puedan haber trazadas alternativas, porque cuando hay un 'carril engomado', frenar o trazar fuera de él significa perder adherencia. Eso facilitó el ver luchas cuerpo a cuerpo en frenadas y curva, intentos de adelantar consumados o no, y coches casi rozándose. Es decir, batalla en pista y no exclusivamente fiada sólo a la estrategia o al efecto del DRS.

MÁS VELOCES

Por otra parte cabe destacar la notable mejora de las prestaciones con respecto a los cronos de la era híbrida. Los cuatro segundos de los que se hablaba como mejora probable acudieron a la cita. El 1'31"678 que le valió la pole a Lewis Hamilton contrastan con el 1'35"402 de Nico Rosberg en 2016 o el 1'35"782 del propio Lewis un año antes.

Es más, este registro es mejor que la vuelta rápida de Michael Schumacher en 2004 (1'32"238), el mejor crono que se había registrado nunca en Shanghái y al que desde entonces nadie se había ni siquiera acercado. Fue cuando en la F1 no sólo había repostajes de gasolina sino que además los neumáticos eran libres.

La temporada no ha hecho más que comenzar. Primero vino una de arena, después una de cal. Hay que esperar a ver qué nos depara la siguiente cita... ¡Espero que cal!