La lección de Zandvoort: un milagro Brawn es irrepetible
Es cierto, ya pasó en Estiria, el primero de los dos Grandes Premios de Red Bull Ring, otro circuito 'corto' para lo que es habitual en Fórmula 1, donde los pilotos los dos equipos dominantes doblaron al resto.
Son dos trazados en los que se rueda por debajo de 1'15'' a ritmo de carrera en cabeza. Así que no debe extrañarnos que acabaran doblados porque en varios circuitos este año el mejor de los otros ha quedado a más de un minuto del ganador, pero al ser el trazado más largo no ha caído en la vergüenza de acabar doblado.
Lo que está claro es que hay una diferencia brutal entre los dos equipos de cabeza y el resto. No me refiero a la diferencia en tiempo, sino en competitividad. Incluso en los circuitos que ellos dicen no les son favorables no dejan el menor resquicio a sus rivales.
Tanto Red Bull como Mercedes van bien en todas partes. En unos lugares van bien y en otros, mejor. Por el contrario, detras de ellos las cartas cambian con facilidad según los circuitos o la meteorología y eso provoca altibajos sorprendentes.
McLaren tuvo un mal día. Aston Martin, igual. Los Ferrari acusaron los duros y ello permitió a Fernando Alonso y a su Alpine insertarse entre ellos. Alpha Tauri pudieron así 'doblegarlos' a todos, cosa que no siempre pueden hacer.
La diferencia de rendimiento entre clasificación y ritmo de carrera es abrumadora en casi todos ellos. En unos circuitos se comportan bien, pero en otros su rendimiento cae de forma importante o lo hace según las gomas que lleva Pirelli o la temperatura ambiente.
Y esto hace que debamos preguntarnos muchas cuestiones sobre la próxima temporada. El cambio de reglas dicen que representa una oportunidad para mezclar las cartas. Pero visto lo visto aquí, diría que no parece factible que esto suceda en 2022 ni quizás ni en 2023.
Puede ser que un cambio de reglas pueda provocar alguna diferencia, cambiar el orden entre dos equipos que están relativamente cercanos en cuanto a rendimiento. Ya lo han advertido algunos: lo normal es que los equipos que estén arriba, sigan estando arriba. Puede que entre ellos se mezclen un poco… Pero tradicionalmente nadie que está abajo logra dar el salto por unos cambios de reglas, se necesitan muchas más cosas.
Así que en 2022 me espero más de lo mismo. Quizás Ferrari y McLaren se acerquen un poco más, pero el abismo es tan profundo que difícilmente podrá colmarse. El milagro Brawn, con las reglas tan estrictas como las actuales, no parece repetible.
