¡Que no nos quiten Fafe!

22/05/2018 10:53

En el Mundial de Rallies no sólo hay uno. A fin de cuentas, por proporción deberían haber muchos más. Mientras los circuitos suelen tener una longitud de pocos kilómetros, los vehículos de rallies tienen que hacer frente a más de mil kilómetros en cada prueba, contando enlaces. Las pruebas de antaño eran considerablemente más extensas, pero esa es otra historia.

Como decía, en el WRC hay infinitos parajes a los que admirar. Desde las heladas carreteras de Monte Carlo hasta la calidez de las antípodas. Desde los tramos de asfalto y tierra, hasta la nieve de Suecia. Todo ello, volando. Literalmente. Estos bólidos vuelan cada vez que se les presenta la oportunidad. Colin's Crest, Micky's Jump o los famosos saltos de Ouninpohja, entre otros, tienen la culpa. No obstante, en este selecto grupo aparece uno muy cercano: Fafe.

Cada año, los fervientes aficionados acuden a su cita con Fafe y su célebre salto. Como viene siendo habitual, el espectacular recorrido fungió como Power Stage para otorgar puntuación extra a los cinco pilotos más rápidos. Pero no todas las miradas se centraron en el paisaje o, incluso, en los pilotos y copilotos tratando de despegar como si de un avión se tratase.