Max Mosley insta a los equipos a aceptar la situación actual
La situación en la Fórmula 1 estas últimas semanas está siendo más que delicada y parece que todo el mundo quiere tener su momento de gloria con la prensa. Esta vez el turno es de Max Mosley, que básicamente les dice a los equipos que 'se aguanten'. Es la respuesta del británico a los comentarios de Helmut Marko, que pedía un liderazgo como el de Mosley para la Fórmula 1 actual.
El actual presidente de la FIA, Jean Todt, tiene un perfil muy distinto y sean aceptadas o no sus decisiones, ha apostado por un estilo mucho más discreto. Mosley, por su parte, deja la discreción post-presidencia de lado: "Sólo unanimidad podría forzar un cambio y dudo mucho que se pongan todos de acuerdo. Firmaron esto y ahora tienen que aguantarse", comentó.
Mosley dijo también en voz alta lo que muchos piensan pero sólo insinuan: "Nunca se quejan del dominio de un equipo cuando son ellos quienes dominan. Sólo cuando están en el lado opuesto y la situación les perjudica. La dominación es parte del deporte, desde mediados de los años 50, cuando Mercedes ya lo hizo", recordando que a lo largo de la historia de la Fórmula 1 han existido estas situaciones a menudo.
No hay nada que hacer salvo que todos se pongan de acuerdo y eso no sucederá
Hablando con City A.M., Mosley afirma que el reparto de dinero -unos 900 millones de euros- entre los equipos podría hacerse de forma más justa: "El efecto de tener mucho más dinero es el mismo al de tener un motor más potente". Pero apunta también a los equipos y fabricantes como culpables del estado actual de la categoría reina: "Los equipos se han gastado demasiado y los fabricantes cobran demasiado por sus motores".
Su conclusión es que todas estas acciones llevan a la situación actual de forma inevitable: "Ahora todas las señales apuntan a que un equipo dominará la Fórmula 1 durante dos o tres años más y no hay nada que pueda hacerse a menos que todos se pongan de acuerdo. Y eso no sucederá". Palabras que, sabias o no, vienen de un hombre con experiencia en el politiqueo que rodea a la Fórmula 1. Y en latigazos. Pero esa ya es otra historia.
