ACTUALIDAD

Ferrari teme las imitaciones del resto de marcas

José Miguel Vinuesa
05/04/2019 17:58

Ferrari se enfrenta a una dura competencia en el segmento de los coches deportivos de alto rendimiento, y le preocupa que sus rivales puedan tomar ideas de sus modelos para acabar sobrepasándoles.

No se trata de un asunto nuevo, puesto que la marca ha tenido que luchar durante los 71 años de su existencia frente a muchas marcas cuya exclusividad era similar a la de los coches salidos de Maranello, pero quizás en estos tiempos es más preocupante. Aunque para el presidente de Ferrari, Louis Camilleri, "la imitación es la mejor forma de adulación. Estamos halagados".

Quizás el mayor de sus rivales históricos, al surgir casi al mismo tiempo, es Porsche, pero a él se fueron sumando otros, como Lamborghini, mientras otras marcas han crecido en la actualidad hasta ser un serio rival, como Bugatti o Aston Martin, y más recientemente, McLaren. Y a eso hay que sumarle una gran cantidad de pequeños fabricantes que les ponen las cosas difíciles: Pagani, Koenigsegg e incluso Pininfarina.

Durante prácticamente toda su existencia, la casa de diseño fue la que creó los modelos Ferrari casi con exclusividad, hasta el punto de fundirse en el imaginario popular ambas marcas: no había un Ferrari que no fuera diseño Pininfarina, y Pininfarina era el diseñador de los Ferrari. Eso ha cambiado desde hace unos años, cuando los diseños de los nuevos Ferrari responden exclusivamente al Centro Stile de la propia marca. Pero Pininfarina ha dado un paso adelante: la construcción de sus propios coches deportivos, aunque eléctricos, como el Battista. Pero la cuestión es la exclusividad.

Porque es difícil ver un Ferrari, pero más aún un McLaren, o un Pagani, por ejemplo. Y es ese aura de lo exclusivo lo que otras marcas están arañando del patrimonio de los de Maranello, algo con lo que los italianos habían contado casi como seña de referencia. Y lo sigue siendo, pero con tantas opciones en el mercado, y con el aumento de producción que la propia marca se ha impuesto, esa característica se ve disminuida, hablando siempre en términos relativos.

Cada vez, sin embargo, hay más y más superdeportivos. Lejos queda aquél tiempo en que prácticamente hubo tres: el F40, el Porsche 959 y el McLaren F1. Si hoy miramos el mercado de este segmento, aparecen muchos modelos de rendimiento brutal y aspecto radical, que luchan por desplazar ese atractivo que los modelos especiales de Ferrari siempre habían despertado –y despiertan- entre los compradores. Por supuesto, también está el aspecto tecnológico, las innovaciones que se introducen en los nuevos modelos, y que las otras marcas pueden tomar prestado.

Sin embargo, hay algo en lo que Ferrari les ha ganado la mano a todas ellas. Y es en el concepto de marca, con un posicionamiento global envidiable, hasta el punto de haber llegado a ser la marca más famosa del mundo. Y eso lo logró no sólo con sus coches y la competición, aunque por supuesto fundamentalmente, sino también con una intensa introducción en varios ámbitos comerciales que han popularizado todavía más la marca: hoy puedes tener prácticamente de todo con el emblema de Ferrari, desde un llavero a ropa, e incluso pasar un día familiar en uno de sus dos parques de atracciones, en Abu Dhabi y en España, algo en lo que otras marcas fallan estrepitosamente.

En el futuro, varias marcas han anunciado la presentación de superdeportivos que buscarán asombrar al mundo, y dar un nuevo bocado al terreno de Ferrari. Su preocupación no es excesiva, porque saben que con el lanzamiento del sucesor del LaFerrari, el mundo volverá a girar hacia ellos, sólo hay que ver la admiración que ha generado el ‘one-off’ P80/C. Es lo que conlleva estar 71 años en la cumbre. La lucha por mantenerse ahí será muy interesante.