El Land Rover Defender con complejo de discoteca Red Bull
Red Bull siempre ha tenido ideas 'alternativas', por llamarlo de alguna manera y no hay más que mirar a este Land Rover Defender de batalla larga para darse cuenta de ello. Con una estética inspirada en el caza F-22 Raptor y reminiscencias de un vehículo militar blindado, estamos delante de una suerte de discoteca móvil. Eso sí, hay que echarle imaginación para ver un Land Rover debajo del contrachapado.
En cualquier caso, este vehículo ha sido desarrollado en Australia y presenta una carrocería de formas angulosas, con una notable caída en la parte trasera. El contrachapado le da una aire militar, aunque para la ocasión se ha optado por un color negro mate en combinación con los habituales colores y logo de Red Bull. Uno de los aspectos más destacados del peculiar diseño es su frontal, capaz de atropellar al aburrimiento con unas protecciones futuristas.
En lo que respecta a su equipamiento fiestero, aquí es donde Red Bull marca diferencias. En un diseño tan peculiar como funcional, este vehículo es capaz de desplegar en tiempo récord una pequeña cabina de DJ, una pantalla digital de un tamaño considerable y un par de altavoces. En menos de lo que se tarda en abrir una lata de su bebida energética, este vehículo es capaz de montar una fiesta que no tiene nada que envidiar a las organizadas en Ibiza.
A pesar de su espectacularidad, Red Bull no ha dado demasiados datos sobre este Land Rover Defender 130. Sabemos que se trata de un vehículo 4x4, pero no tenemos datos sobre su potencia o sus prestaciones. Por una vez esto no es lo más importante, aunque también nos quedan dudas de si el motor podrá alimentar todos los aparatos eléctricos en plena fiesta. Es más que probable que tenga que recurrir a un generador externo, pero con la música a todo volumen poco importa.
