La Fórmula E se encuentra en una etapa de quietud obligatoria tras haber disputado cinco ePrix. Desde que se confirmó la cancelación de sus actividades deportivas por el coronavirus, las encuestas, estadísticas y hasta carreras virtuales son la mejor forma de mantenerse conectados con sus aficionados.
El piloto de MotoGP Andrea Dovizioso cambiará su Ducati por el Audi RS 5 del DTM durante un fin de semana, pues sustituirá a Pietro Fittipaldi en la cita del campeonato alemán de Misano los próximos días 8 y 9 de junio.
Como cada temporada, cuando el calendario se acerca al verano europeo y al consiguiente parón de las carreras por tres semanas, es el famoso momento cumbre de la 'silly season'. O dicho de otra forma, el período donde afloran los rumores para la temporada siguiente.
No son pocos los pretendientes a retornar al calendario del Campeonato del Mundo de Rallies, ya que es bien sabido que los organizadores quieren incluir un decimocuarto evento. Tras la ausencia de China el año pasado, debido a las malas condiciones meteorológicas que hicieron impracticable el recorrido, su puesto se ha convertido en una joya para los promotores de varios rallies.
Estaba previsto que la temporada de la Fórmula E terminase el 29 de julio con una carrera doble en Montreal, pero hace exactamente un mes, Valérie Plante –alcaldesa de la ciudad- informo que la prueba no se celebraría por los altos costes que conllevó en su edición de 2017.
A la Fórmula E le llueven críticas, que la consideran un "fiasco financiero" a raíz de la cancelación del ePrix de Montreal. La ciudad canadiense iba a celebrar la final de la temporada 2017/2018 de Fórmula E el próximo mes de julio, pero la alcaldesa Valerie Plante ha anunciado que los contribuyentes no querían pagar los 23 millones de euros necesarios.
Montreal no albergará finalmente la cita final de la temporada 2017/2018 de la Fórmula E. Estaba previsto que el último ePrix de la cuarta campaña de la categoría eléctrica se celebrara en suelo canadiense, pero finalmente ha sido cancelado ya que la ciudad no está dispuesta a organizar la carrera.
Joven, simpático, con talento y rápido. Muy rápido. Y de esa rápidez luce siempre lo que lleva dentro, esa naturalidad que a veces hace falta o se echa de menos en un piloto de Fórmula 1, como la cercanía. Roberto Merhi es de esa clase de pilotos. El de Manor ha sacado gala de aquella rapidez por la que en el equipo angloruso decidió contar con él. Y lo que iba a ser unas pocas carreras, se ha convertido casi en media temporada en la que ha estado brillante con lo poco que puede permitirse.
