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Es la que reconocía Toto Wolff a la hora de hablar de la permanencia de Lewis Hamilton más allá de 2020 como piloto de Mercedes, aunque admitía que es imposible afirmar que los títulos seguirán llegando la próxima temporada y sucesivas. "No hay nada que nos asegure que vayamos a ganar un séptimo o un octavo título de inmediato, así que debemos mantenernos humildes y cautos respecto a ello", confesaba el austriaco, para a continuación añadir que desde un punto de vista racional, Hamilton tiene fuertes lazos con los de Brackley, respecto a un proyecto común por largo tiempo y respecto a que el piloto británico pudiera sopesar el cambio de escudería, Wolff concluía de la siguiente manera: "Hemos hablado entre nosotros abiertamente sobre Ferrari y lo que representa esa marca. Pero para mí, creo que mientras podamos fabricar un coche rápido y un motor potente, siempre vamos a tener la oportunidad de contar con su presencia en nuestra filas".

Es la que ha manifestado constantemente Christian Horner desde hace años por su actual equipo, al margen de rumores que en ocasiones le situaban como probable sustituto del máximo responsable de alguna que otra escudería puntera. Y ante qué se le pasaría por la mente, caso de que Chase Carey dejase la dirección de la Fórmula 1, Horner afirmaba: "Me encanta competir y por eso estoy entregado a Red Bull. Quiero conseguir mucho más en el plano competitivo". A continuación el británico aseveraba el objetivo de devolver a Red Bull a una posición ganadora de cara al Campeonato. Como punto y final a estas teorías con tan poco fundamento, Horner no podía hacer otra cosa que apostillar: "No tengo constancia de que Chase vaya a dimitir. Creo, además, que hay mucha especulación. Por tanto, sólo puedo decir que estoy muy contento de hacer lo que hago y de concentrarme sólo en Red Bull".

Esa es la sensación que ha sentido Kevin Magnussen en los test celebrados en Barcelona, cuando al situarse en algún que otro momento cercano a la parte trasera del monoplaza que le precedía, sentía como si todo fuera más sencillo. Así el piloto de Haas narraba: "Era mucho más rápido que el tipo al que seguía y le pude superar en la vuelta siguiente, al darle alcance. Puede que fuera como dos segundos más rápido, así que también le hubiera adelantado la temporada anterior". Sin embargo, según el danés, las sensaciones fueron diferentes al estar detrás del otro coche, algo mejores, así que desea ver si en otros circuitos pasa lo mismo. "Siempre hay factores diferentes que podemos no haber tenido en cuenta. Cuando vamos a otro circuito, puede ser distinto, pero los primeros indicios son positivos a la hora de seguir a otro monoplaza", confesaba Magnussen.

Es lo que ha comentado Max Verstappen a raíz del incidente que tuvo con Sebastian Vettel en el Gran Premio de China y por el que, tras la carrera, sufrió algún que otro rapapolvo, en concreto, por parte de Helmut Marko. El piloto seguidamente confesó: "No fue mi mejor carrera, pero no tengo que pensarlo más", pues según él, ha aprendido y sólo piensa en la siguiente cita del calendario, sin dejar de ser agresivo, aunque "estudiando mejor la situación". Ante todo lo anterior y a modo de resumen, confesaba seguidamente respecto a solicitar los consejos de un profesional: "No necesito un psicólogo, duermo bien. Debería haberlo hecho de otra manera, pero si se supiera todo con anticipación, se podría cambiar el mundo entero. En algún momento hay que mirar hacia delante, así que ya pienso en Bakú". Esperemos que Max se atempere lo antes posible.

Por el título y de citar al equipo Red Bull Racing, creo que muchos ya pueden estar intuyendo a qué persona puedo referirme, pues desde luego, Helmut Marko por allí manda y mucho, a la hora de la toma de decisiones, sobre todo, en los respectivo a qué piloto o pilotos ocupan u ocuparán los cockpits de sus respectivos monoplazas.