Vettel tiene un enemigo: el turbo de Ferrari

Ferrari parece sentirse cómodo en cualquier circuito. Parece capaz de explotar mejor los neumáticos que el Mercedes, algunos dicen que porque Vettel realizó test con Pirelli el pasado año y Lewis, no. El motor Ferrari está emparejado en potencia al propulsor alemán.

Todo ello ha llevado a Toto Wolff a afirmar que este año no son favoritos, pese a que han ganado tres de los seis GP disputados. Y Niki Lauda ha dicho muy recientemente que si Vettel no abandona, adiós al título y algo más del doble sobre los siguientes.

Y los tifosi cruzan los dedos nerviosos por aquello del "esté año, sí". Pero la última corona roja data de 2007, es decir de hace una década y eso los tiene escarmentados. Recuerdan sin duda aquella corona de 2008 que escapó a Felipe Massa o la de 2010 que se le escabulló a Fernando Alonso-

Hacen bien los tifosi. Quizás no hagan falta abandonos de Vettel para ‘perder’ el título. Es posible que baste con penalizaciones en la parrilla de salida. Un tema que preocupa seriamente en Ferrari, sobre todo por lo que al turbo y al generador a él asociando (el MGU-H) se refiere.

Vettel ya ha gastado sus cuatro turbos de la temporada; casi uno por GP. Y está ya en 3 MGU-H, es decir una cada 2 GP. El próximo turbo que rompa entrañará penalización en la parrilla de salida. Y si esto no es en Canadá, sucederá en el siguiente GP, Bakú, según la estadística. Sólo los McLaren llevan peor sus estadísticas de elementos de la unidad de potencia consumidos. 

Está claro que, bajo la tutela de Sergio Marchionne y la dirección de Martino Binotto, en la Scuderia se ha elegido el camino del riesgo como única forma de llegar a la altura de los Mercedes. Unos Mercedes que parecen tener algunas dificultades, al menos en otros circuitos.

Para los rojos, ahora hay una cuestión táctica clave: ¿Dónde penalizamos? Está claro que la elección del lugar, siempre que se pueda, resultará clave. Han aprendido la lección de los problemas que Lewis Hamilton tuvo para ir superando posiciones en Mónaco y saben que la posición de parrilla penaliza más en algunos trazados y algo menos en otros.

La ‘pelota’ está ahora en manos de los técnicos. En Mercedes deben solucionar sus problemas aerodinámicos o de suspensiones que no parecen dejar que las gomas trabajen de forma óptima. Y en Ferrari, solucionar el tema de fiabilidad del turbo; penalizar en una ocasión puede ser aceptable, pero encadenar penalizaciones sería como dispararse al pie.

Así que, pese a los 25 puntos de ventaja de Vettel, todo está en el aire. Si Sebastian tiene tal ventaja no es sólo porque siempre haya sido porque ha encadenado primeros y segundos, sin bajarse de uno de los dos escalones, sino porque Lewis ha ‘fallado’ en dos ocasiones; sólo fue 4º en Rusia y sobre todo el 7º de Mónaco. Sin estos dos ‘lapsus’, es muy probable que Hamilton estuviera ahora con 10 puntos más por lo menos, es decir a sólo 12 o 15 de Vettel.