'Corre que vuelan': Los Volvo Diesel nuevos a la venta en España

El jueves 28 de marzo de 2024 fue un día histórico para Volvo. Fue entonces cuando su último coche equipado con un motor Diesel, un V60, salió de la cadena de montaje, concretamente de la ubicada en la ciudad belga de Gante.

Esta decisión estratégica llega en un momento en el que Volvo quiere llegar a ser un fabricante neutro en carbono en 2040, además de convertirse en una marca que sólo venda coches eléctricos desde diez años antes. Sin embargo, comprar un coche Diesel de la firma sueca aún es posible gracias a las unidades en stock que aún quedan y, lógicamente, al mercado de ocasión.

Desde la página web de Volvo se pueden ver qué coches quedan en stock aún con motor de gasóleo. La empresa asegura que todas esas unidades se entregan a su dueño en un plazo máximo de 40 días siempre y cuando éste viva en la Península o en Baleares. Los canarios tienen que preguntar directamente en el concesionario.

VOLVO V60

El Volvo V60 es el modelo nuevo más económico que queda en stock con motor Diesel. Las unidades más accesibles rompen por poco la barrera de los 50.000 euros –52.200 en el mejor de los casos–.

La mecánica en concreto se trata de un 2.0 litros de cuatro cilindros con una potencia de 197 caballos y un par máximo de 420 Newton metro. Cuenta además con un sistema mild-hybrid de 48 voltios que le otorga la etiqueta eco en nuestro país y que permite homologar un gasto de carburante inferior a 6 litros a los 100 kilómetros. El cambio es automático con ocho velocidades.

El V60 también se puede adquirir aún en su versión Cross Country con motor Diesel, el mismo que en el caso anterior, aunque para ello hay que desembolsara día de hoy un mínimo de 60.300 euros. Este extra de dinero permite acceder a un vehículo que presenta modificaciones tanto en el chasis como en la carrocería, que se aleja 7,5 centímetros del suelo, que aportan ciertas habilidades fuera del asfalto

VOLVO XC60

El Volvo XC60 es otro de los modelos de la firma sueca que aún se puede comprar con mecánica de gasóleo. Se trata del mismo motor que en el caso del V60 también asociado a un cambio automático de ocho marchas.

En este caso las unidades más económicas no llegan a romper la barrera de los 60.000 euros –56.250 es la más barata actualmente–.

Con este motor, el SUV de cinco plazas es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 8,3 segundos. El gasto de carburante oficial supera, lógicamente, el del V60, aunque sólo para rebasar levemente la barrera de los 6 litros a los 100.

VOLVO V90

El tándem formado por el Volvo V90 y su versión campera, el V90 Cross Country, también se pueden adquirir todavía con motor Diesel, exactamente el mismo bloque del que hemos hablado hasta ahora en este artículo.

Las unidades en stock parten desde 70.000 euros en el caso de la variante más civilizada y desde 72.000 en el de la que permite ciertas licencias off-road. Tal y como sucede con el dúo formado por el V60 y el V60 Cross Country, la que lleva el apellido aventurero se vende sí o sí con tracción total, algo que hace que el consumo de combustible oficial sea ligeramente mayor, de 6,3 litros a los 100 kilómetros por los 5,6 que llega a anunciar el V90.

Volvo XC90

El último de los Volvo que aún están en stock con motor Diesel es el XC90. El SUV de siete plazas cuenta con un propulsor de 2.0 litros con 235 caballos de potencia y un par máximo de 480 Newton metro. Es de tracción total y su cambio vuelve a ser automático de ocho velocidades por convertidor de par.

El consumo medio de combustible homologado puede llegar a ser inferior a 7 litros, concretamente de 6,8 a los 100 kilómetros en el mejor de los casos. Como sucede con los coches anteriores, el sistema mild-hybrid ayuda a mejorar esta cifra y permite el acceso a la etiqueta eco.

El precio de las unidades más accesibles es de 80.300 euros.

VOLVO SELEKT

Volvo Selekt es el programa de la firma sueca de coches de ocasión. Es el propio fabricante el que garantiza el buen estado de estas unidades tras una estricta revisión en la que se verifican más de 100 parámetros. Además, Volvo asegura que, en caso de necesitarse recambios tras este examen, son siempre originales. Cada vehículo cuenta con su libro de mantenimiento y el historial completo, algo que entre otras cosas permite garantizar el kilometraje. Tras todo este proceso, un agente externo del concesionario en cuestión lleva a cabo un control de calidad certificado.

Mediante este método es posible acceder a más modelos de la marca dotados de motor Diesel, lógicamente también a aquellos de más antigüedad que ya no se comercializan como nuevos.