Sainz, Renault y Red Bull, ¿traspaso o cesión?

El cambio de escudería del madrileño, visto desde lejos y con la información disponible, parece más una 'cesión' –similar a las que se dan en el fútbol– que a un 'traspaso' de escudería. Uno de elementos de un complejo 'pack' de negociaciones que deja razonablemente satisfechas a todas las partes a la espera de la solución definitiva en 2019, posiblemente ya perfilada en todos los papeles firmados estos días.

Sainz logra así un objetivo, el de ser el de volar a un equipo con mayores posibilidades que Toro Rosso dado que el salto a Red Bull, su objetivo inicial, no es factible por el momento. Renault es uno de los tres únicos equipos de 'gran constructor', los únicos que sobre el papel tienen mayores ventajas a la hora de batallar por el campeonato… aunque es cierto que Renault está claramente por detrás de los tres equipos grandes –Mercedes, Ferrari y Red Bull– e incluso el próximo año muy posiblemente tendrá también a McLaren por delante.

Su problema inmediato es alcanzar a Force India y Williams. Y para eso no sólo necesita mejorar sino tener una 'dupla' de pilotos. Por ahora en realidad sólo tiene uno ya que el controvertido Jolyon Palmer todavía no ha aportado punto alguno al equipo este año y los 34 que lleva Renault en el casillero son los que ha traído Nico Hülkenberg... dos menos de los que Sainz a sumado para Toro Rosso, esta temporada 'cliente' Renault.

Renault consigue así un piloto seguro, eficaz, como es el madrileño, con hambre de resultados, talento y capacidad de esfuerzo. Eso, sin duda, puede permitirles aspirar razonablemente a ser el quinto equipo del Mundial.

Y Red Bull se asegura poder disponer de Sainz en clave 2019 si ello es necesario. Los austríacos temen que alguno de sus pilotos quiera cambiar de aires en 2019. Max Verstappen parece descontento; se ha dado cuenta de que en un equipo 'cliente' –motoristicamente hablando– sus aspiraciones de título están coartadas y su padre Jos flirtea con Mercedes o Ferrari a la mínima oportunidad; el niño no se corta un pelo en señalar que Red Bull debe mejor para retenerlo. Pero también Daniel Ricciardo podría tomar la decisión de levantar vuelo, sobre todo si se huele que Red Bull prefiere un título de Max a uno suyo.

Red Bull sabe perfectamente que en este caso no tiene otra alternativa en su 'pirámide' de formación que Carlos Sainz. De hecho su salto a Renault es abrir un nuevo capítulo en su formación, pasar de la carrera y la titulación a un cursar un auténtico máster. Y sobre todo le consolida en este mundo de la F1. Y eso es lo más importante.

Renault consigue así una dupla ambiciosa. Nico Hülkenberg está considerado como uno de los mejores pilotos de F1 pese a la ausencia de resultados: lleva 144 GG.PP. disputados sin haber sumado un podio todavía… aunque también es verdad de que nunca ha dispuesto de un coche capaz de conseguirlo, salvo que se reuniesen circunstancias excepcionales.

Y Sainz, que muy cerca estuvo de no subir a la F1, está considerado como un futuro valor seguro, quizás infravalorado por algunos por un hecho circunstancial: haber tenido que medirse directamente con el exuberante Verstappen. Tanto en Red Bull como en Toro Rosso lo sitúan a la par del holandés, aunque éste sea mucho más mediático y polémico, lo que a la postre es ser aún más mediático en un mundo donde todo lo que no sea 'políticamente correcto' llama la atención… salvo que se goce de bula.

Estoy convencido de que Sainz con este cambio, sentará las bases de su futuro, un brillante futuro.