Alonso: "Ahora el piloto es todavía menos importante"

Esta temporada, los coches generan más downforce que en 2016. Cuan más perfecto sea un chasis, más eficaz será en el paso por curva y por ende más rápido. Esa carga aerodinámica se transforma en resistencia al avance en las rectas, lo cual significa que la potencia es una virtud necesaria para que los monoplazas se mantengan competitivos. No es que estos dos factores sean una novedad, pero el nuevo reglamento técnico los ha radicalizado.

Por esta razón, Fernando recuerda que los pilotos pueden hacer milagros “hasta un punto” y que no podrán compensar todas las carencias de sus bólidos con su pilotaje. Cree que la tecnología ganará peso a costa del factor humano en el rendimiento final de cada escudería.

"Este año parece que puedes usar un poco más tu estilo –de pilotaje- para maximizar la vuelta, pero la importancia del piloto, o el porcentaje entre piloto y coche del que a veces hablamos… Creo que con la tecnología, motores y aerodinámica que tenemos, ahora el piloto es aún menos importante", ha dicho en su rueda de prensa, donde ha hecho balance del primer día de pretemporada en Montmeló.

"Con este nivel de drag y carga aerodinámica, necesitas muchísima potencia. Las rectas son un poco más largas que el año pasado y algunas curvas desaparecerán. Si en 2016 tenías 20 kilómetros/hora menos, perdías dos o tres décimas. Ahora quizá pierdas medio segundo. La importancia de algunos aspectos técnicos es superior este año. El piloto puede hacer milagros hasta cierto punto".

Pero al mismo tiempo señala que esa dependencia reside precisamente en los grandes ejes que configuran una Fórmula 1 más atractiva.

"La única conclusión es que los coches son bonitos, más rápidos en las curvas. Es bueno volver a esa sensación de downforce y poder llevar el coche un poco más al límite. He visto otros coche spor la pista y pintan muy bien. Estoy muy contento con eso, contento de que el deporte vaya en la dirección correcta. Me siento mal por los fans, han visto coches horribles estos últimos años".

El asturiano siente que los nuevos Fórmula 1 no serán tan radicales de pilotar como los que condujo en sus inicios en el Gran Circo.

"Llegar a los tiempos y tener las sensaciones son dos cosas distintas”, matiza. “Nunca más vamos a tener las sensaciones de 2004 o 2005, porque los coches tenían una libertad aerodinámica que no tenemos y tenían unos motores muy diferentes en conducción a los que tenemos ahora. Eso en sensaciones".

"En tiempos, puede que sí. Si pusiéramos los coches de 2004 con estos neumáticos lisos, haríamos 1’14 o así. Es diferente. Me gustó lo que vi ayer y me gusta lo que he visto hoy. Los coches parecen de Fórmula 1, son coches muy bonitos. Espero que transmitamos esa sensación al espectador y que intenten olvidar lo que han visto estos últimos años".