El Ferrari de Miguel Molina, Niklas Nielsen y Antonio Fuoco ha sido el más rápido en la jornada de ensayos libres para las 6 Horas de Imola, segunda prueba del WEC, que se disputa en el trazado italiano que lleva el nombre de Enzo y Dino Ferrari.
Miguel Molina revela que ganar las 24 Horas de Le Mans es su principal objetivo para 2024. El español se muestra optimista para la nueva temporada y quiere quitarse esa espina de la pasada edición y le encantaría triunfar en el Circuit de La Sarthe junto a Antonio Fuoco y Nicklas Nielsen el próximo 16 de junio.
Felipe Nasr, Matt Campbell, Don Cameron y Josef Newgarden se han impuesto en las 24 Horas de Daytona a los mandos de un Porsche 963 de Roger Penske. Miguel Molina y Albert Costa, segundo y tercero en la categoría GTD, componen doble podio español. La nota 'negativa' para España la han puesto Àlex Palou, que tuvo que retirarse y la mala suerte de la dupla Antonio García-Dani Juncadella.
Ferrari ha confirmado que sus dos coches 499P oficiales en el WEC tendrán las mismas ‘tripulaciones’ que el pasado año.
Fiesta grande en Maranello ayer martes. Toda la ciudad celebró el triunfo de Ferrari en las 24 Horas de Le Mans, cincuenta años después de haber abandonado la prueba y la especialidad.
El Ferrari 499P ya es un coche ganador. El equipo italiano ha hecho historia al conseguir la victoria en el centenario de las 24 Horas de Le Mans, 50 años después de su última participación. Una victoria que da alas a sus pilotos y Miguel Molina ya tiene puesta la mente en la siguiente prueba: Monza, casa de de Ferrari, donde espera desafiar a los Toyota de tú a tú.
Miguel Molina sueña con la victoria en las 24 Horas de Le Mans, pues se sienten más cerca de Toyota de lo que pensaban. El español sabe que tienen una competencia muy dura en frente, pero confían en aprovechar esas condiciones más frías para llegar con opciones para cuando salga el sol mañana.
Ferrari ha vuelto a las 24 Horas de Le Mans por la puerta grande. Los de Maranello firmaron ayer un doblete en la clasificación y tienen grandes expectativas para la carrera, aunque no las confiesen. Entre los pilotos que lucharán por sobrevivir y ganar en el centenario de la mítica prueba de resistencia está el español Miguel Molina, muy orgulloso del trabajo realizado, hasta el punto de que "no se puede pedir mucho más". Molina es consciente de las posibilidades de su equipo, pero pide mantener "los pies en el suelo" y augura una carrera muy apretada donde marca a los Toyota de favoritos.
Miguel Molina aplaude el trabajo de todos y cada uno de los empleados de Ferrari en el WEC tras la Pole histórica lograda en Le Mans. El español recuerda que hace un año este Hypercar aún no estaba en marcha y en un breve periodo de tiempo, han sido capaces de fabricar un coche capaz de ser el más rápido, con diferencia, en uno de los circuitos más míticos del mundo.
Miguel Molina afronta sus séptimas 24 Horas de Le Mans. Siempre como piloto de Ferrari, siempre buscando la victoria, aunque en las seis ediciones anteriores el objetivo era ganar en LMGTE, la categoría de los GT. Este año, cambia todo: está a los mandos de un Ferrari 499P, el Hypercar de Ferrari, y por vez primera tiene opciones de buscar la victoria absoluta.
Miguel Molina vio como un Porsche le impidió hacerse con la Pole para las 6 Horas de Spa. El de Lloret, a falta de poco más de cinco minutos, marcó un crono de 2’00”812 y en la siguiente vuelta lo estaba mejorando: había mostrado dos ‘verdes’ en los dos primeros sectores, pero se encontró con un Porsche al final y se quedó sin poder mejorar por muy poco.
Miguel Molina y Albert Costa fueron protagonistas de la primera jornada de ensayos para las 6 Horas de Portimao, segunda prueba del Mundial de Resistencia.
Miguel Molina obtuvo un podio en su debut en la categoría reina de la resistencia, los Hypercar. Junto con Antonio Fuoco y Nicklas Nielsen, el de Lloret de Mar llevó el Ferrari 499 P al tercer lugar de las 1000 Millas de Sebring. Este fin de semana, Miguel y sus compañeros querrán subir al menos uno, a ser posible dos, peldaños en el ‘cajón’ de las 6 Horas de Portimao.
A sus 34 años, Miguel Molina está viviendo el punto culminante de su carrera. No sólo sigue siendo piloto de Ferrari, sino que ha dado un paso más allá de los GT para convertirse en uno de los puntales del asalto de Ferrari al WEC y Le Mans en el retorno del Cavallino Rampante a la categoría máxima de la Resistencia, cincuenta años después de haberse retirado de ella para concentrarse en la Fórmula 1.
Miguel Molina estaba casi en una nube. En su día decidió cambiar de objetivo, entendió que llegar a la Fórmula 1 dependía de demasiadas cosas externas, que no podía controlar, y cambió para centrarse en ser piloto profesional con una carrera de largo recorrido. En 2010 inició el periplo en el DTM donde estuvo siete temporadas, antes de pasar a los GT como piloto oficial de Ferrari. Sus resultados le han abierto las puertas del WEC en la categoría reina coincidiendo con el retorno de Ferrari a los prototipo.
