Juan Manuel Correa ya ha vuelto a rodar con un monoplaza

"Las palabras no pueden describir lo que este momento significa para mí. Sólo puedo agradecer a todos los que me han apoyado para poder llegar a este punto", ha señalado Correa.

No es para menos: para llegar hasta aquí ha tenido que soportar un calvario de 25 operaciones, con el fin de recuperar movilidad y fuerza en sus piernas. Correa aún debe ayudarse con muletas para caminar.

El ecuatoriano-estadounidense tuvo un recuerdo para Anthoine Hubert. "Estará siempre aquí, conmigo", escribió en su Facebook tras el test.

Correa anunció el pasado 1 de febrero que este año correrá en Fórmula 3 con el equipo ART. No se trata de un retroceso, sino de muchos pasos adelante, aunque sufriera su accidente compitiendo en una categoría superior. Lo importante ahora es recuperar los mecanismos, la confianza, el 'punch' y ese paso atrás es simplemente un movimiento para retomar el impulso y superar obstáculos.

Este primer test lo hizo Correa en Paul Ricard al volante no de uno de los F3 de su nuevo equipo sino de un antiguo GP3, dadas las limitaciones que hay con los test. Se trataba de una primera toma de contacto, del comienzo de la  adaptación, antes de empezar una segunda fase, la de ir aumentando la velocidad hasta llegar a la plena competitividad para dar el salto a la F2 lo antes posible. La voluntad del piloto es, obviamente, llegar a la F1.