Indianápolis: llegan mejoras en refrigeración introducidas por el 'aeroscreen'

Pero en realidad la temperatura atmosférica es sólo uno de los aspectos que ha provocado esta decisión. La otra se llama 'aeroscreen', la famosa pantalla de protección de los pilotos, una idea de Red Bull desestimada por la F1 pero adoptada y desarrollada por la Indycar.

Desde la primera carrera con el 'aeroscreen', los pilotos se quejaron del gran calor en el habitáculo. La zona donde van las piernas puede estar fácilmente a 50ºC o 60ºC, pero con el 'aeroscreen' se ha agravado esto, pues hace que el resto del espacio esté falto de corriente de aire.

En una carrera normal no es un problema, pero en unas 500 Millas, una carrera cuya duración debe estar entre dos horas y media y tres, puede serlo; a 350 kilómetros/hora un pequeño descenso de concentración tiene consecuencias fatales… aunque en contrapartida la mayor velocidad favorece una mayor circulación del aire.

El covid-19 no permitió ensayar al máximo con el sistema. Se probó que no impedía la visibilidad, que incluso de noche –recordemos que muchas carreras, sobre todo en su parte final, son nocturnas–, pero el tema del calor no se pudo estudiar a fondo hasta que surgió en las primeras carreras.

Sobre la marcha y recurriendo a la impresión 3D, se han ideado diversas formas para llevar caudal de aire a los pilotos. El famoso test de Jimmie Johnson, el as de la Nascar, a final de junio, tuvo un aspecto que no ha saltado a la luz hasta ahora: se probó una nueva opción de refrigeración del copkpit.

Ese día se probaron cinco o seis posibles soluciones "y un par de ellas parece que funcionaron bien", ha dicho el presidente de la Indycar, Jay Frye, quien dijo que tratarán de introducirlas lo antes posible. La idea de Frye es que la solución que se adopte sea obligatoria para todos.

En Iowa, por ejemplo, se consiguió evacuar mejor el aire caliente del habitáculo, pero esa solución no se usará en Indianápolis porque la elevada velocidad podría someter al pequeño deflector a un presión excesiva. Lo que sí se usará en Indianápolis son mangueras de refrigeración más grandes y los equipos podrán usar filros en las tomas de aire habilitadas para impedir la entrada de pequeños 'detritus' en el habitáculo.

Hay tres entradas de aire, una delante del 'aeroscreen' en el borde del monocasco y otras dos en los laterales, en las zonas de protección de la cabeza; una de ellas lleva aire al casco.

Así que Indianápolis será la tercera carrera consecutiva con modificaciones en el 'aeroscreen', un sistema que será nuevo para Fernando Alonso y al que deberá habituarse con la mayor rapidez posible porque a buen seguro también debe amortiguar la presión aerodinámica sobre el casco del piloto.

Una cosa tiene muy clara la Indycar: no va a renunciar al 'aeroscreen'. En Iowa ya mostró su eficacia en lo que a protección del piloto se refiere.