Audi TT RS 2016: Audi Sport Performance Parts pone el broche

El Salón de Pekin ya tiene su propia estrella. La espera y rapidísima versión RS del Audi TT por fin ha sido presentada en sociedad tras un intenso desarrollo en carretera y circuito, incluido, como no, el trazado de Nürburgring.

El nuevo Audi TT RS es el TT más rápido jamás construido. Desde la primera generación, prácticamente un concept homologado para calle, hasta esta versión han pasado casi dos décadas y la evolución sigue su curso.

Lo primero que llama la atención es su imagen llamativa, al igual que otras variantes RS de la gama Audi. Se distingue por sus entradas de aire frontales de mayores dimensiones que permiten el paso de aire hacia el intercooler y el radiador. La parrilla exhibe orgullosa el logo Quattro en referencia al sistema de tracción y en la zaga destaca el alerón fijo. Por primera vez en un Audi de serie, se pueden solicitar pilotos traseros con tecnología Matrix OLED.

Como versión más deportiva y potente de la gama, el TT RS emplea un motor de cinco cilindros y 2.5 TFSI turboalimentado que rinde 400 caballos -60 más que el anterior- y 480 Newton-metro de par disponibles desde sólo 1.700 revoluciones. El motor recibe muchas mejoras que le permiten adelgazar 26 kilos como un nuevo cigüeñal de aluminio, lo que redunda en un mejor reparto de pesos.

Acelera hasta 100 km/h más rápido que un 911 Carrera S o un Aston Martin Vantage V12

Las prestaciones son inmejorables con una aceleración de 0 a 100 kilómetros/hora en 3,7 segundos, al nivel de muchos superdeportivos que le superan en potencia y precio ampliamente. Audi da la posibilidad de aumentar la velocidad máxima hasta los 280 kilómetros/hora. El peso en seco es de 1.440 kilos, 10 menos que el anterior TT RS.

El sistema de transmisión también ha sido mejorado respecto al resto de la gama. La caja de cambios automática de doble embrague y siete velocidades ha sido aligerada en 2 kilos y dispone de sistema Launch Control. Por su parte, el sistema de tracción Quattro, ha sido recalibrado y trabaja junto a un sistema de control selectivo de par que hace las funciones de autoblocante. Además, ahora también se puede regular el sistema Quattro a través del selector de modos de conducción, que también configura el sistema de escape, la asistencia de la dirección o la caja de cambios.

Suspensiones y frenos han sido igualmente optimizados para lograr un conjunto equilibrado. La carrocería es 10 milímetros más baja y tarado de los amortiguadores más rígido. Se puede equipar en opción la suspensión Magnetic Ride que permite ajustar su dureza desde el interior. Los frenos no se quedarán cortos en potencia: pinzas de 8 pistones y discos de 370 milímetros delante y discos de 310 milímetros detrás. En opción se pueden elegir carbocerámicos.

En el interior encontramos el característico diseño de esta generación: sobrio y de calidad, que en esta ocasión recurre a detalles en carbono –opcional- o aluminio y logotipos RS para mejorar su aspecto. El volante es distinto del resto de versiones y cuenta con el botón de arranque y el de selección de modos de conducción integrados junto a los radios.

La tapicería es específica en cuero y Alcantara y los asientos deportivos van situados más bajos. La pantalla de 12,3 pulgadas dispone de un menú específico RS que muestra la presión de los neumáticos o datos de aceleración lateral y longitudinal.

El Audi TT RS llegará a nuestro país el próximo otoño y lo hará en dos versiones, cupé y roadster. Esta segunda variante dispone de una capota plegable en 10 segundos, calefacción de serie en los asientos y 280 litros de maletero. Sus principales rivales serán el nuevo Porsche Boxster y Cayman 718 y el Mercedes SLC.

Con motivo del debut del Audi A8, la marca ha otorgado al Audi TT (TT, TTS y TT RS) y al Audi R8 distintos accesorios y nuevos componetes bajo la firma Audi Sport Performance Parts. Disponibles en los concesionarios a partir de finales de verano de 2017, estas mejoras afectan a su diseño, así como a distintos elementos mecánicos. En el caso del Audi TT la marca ofrece en primera instancia unos frenos delanteros con fijaciones múltiples y distintos kits de refrigeración, mientras que para el Audi R8 se ofertan unos frenos con pastillas de titanio un kilo más ligeros que los de serie.

Tanto el Audi TT como el R8 pueden equipar unas llantas de aleación de 20 pulgadas con acabado negro más ligeras. Un primer detalle en un diseño exterior que puede recibir un kit aerodinámico exclusivo con nuevas tomas de aire, faldones, splitter frontal, alerón y difusor. Los Audi TTS y TT RS también podrán modificar el sonido de su motor con el nuevo sistema de escape Akrapovic. Por último, Audi ofrece un volante deportivo multifunción plus revestido en Alcantara con levas de cambio en CFRP.

Este mismo material es protagonista en la estructura de refuerzo especial que se ofrece en el Audi TT y que lo convierte en un coche 20 kilos más ligero, a pesar de aumentar su rigidez torsional y mejorar su comportamiento dinámico. En el caso de este TT RS, su velocidad máxima se puede aumentar electrónicamente hasta los 280 kilómetros por hora.