La victoria de Zandvoort es cosa de tres equipos, por fin

Carlos Sainz lo ha advertido: "Habrá que contar con Mercedes". El madrileño recuerdo que normalmente los Mercedes encuentran algo para la carrera.

Y las flechas de plata ven esta prueba como la oportunidad que estaban buscando para salvar la temporada con al menos una victoria y poder incluso arrebatar el segundo lugar de constructores a Ferrari.

"Si Ferrari se centra en Schumacher, puede ser una gran oportunidad para nosotros", ha dicho Russell. Y Toto Wolff afirma que tienen el mejor ritmo en tandas largas que todo es posible en carrera, aunque hubiera sido mejor ver a Lewis en primera línea.

Mientras Max Verstappen y los dos Ferrari han estado en una sola décima. Lewis está a tres, una diferencia que es importante, aunque en ritmo de carrera resulta casi irrelevante.

Para Max, la carrera representa una difícil elección. En condiciones normales pensaría en el título. Pero es el Gran Premio de casa, con una afición entregada–y algunas veces de comportamiento incontrolable– y eso obliga a mucho sobre todo cuando se tiene a su gran rival, Charles Leclerc, a un centenar de puntos. Puede permitirse tomar algún riesgo. Si no sale bien, no pasa nada; la ventaja continuará siendo muy importante.

La carrera promete ser interesante en cabeza, incierta. Y muy emocionante en la batalla por las últimas posiciones de puntos, con Mick Schumacher, Yuki Tsunoda y Lance Stroll ocupando las plazas 8 a 10 de la parrilla. Todos ellos buscarán un resultado que buena falta les hace, aunque sólo Mick no tiene su continuidad asegurada. Eso puede hacer que las intenciones de remontar de Ocon y Alonso sean un poco más complicadas de lo que desearían; los tres citados pelearán a muerte por no verse superados.