Grandes Premios de primera y segunda

Pero a nivel deportivo todos los Grandes Premios deberían valer lo mismo. Poco importante es el escenario o la dificultad del circuito, porque son los mismos hombres, los mismos coches, los que se miden.

Sin embargo, ello no es así, las ‘carreras sprint’ son hechos distorsionantes. Los seis Grandes Premios que las disfrutan tienen un valor mayor que los otros: son 36 los puntos a obtener en lugar de 26. El controlar dos de estos neutraliza, de facto, un ‘cero’ en los otros.

No estoy en contra de las carreras sprint. Me puede parecer incluso interesante…. siempre que sean en todas, siempre que no se use para tener una de las dos carreras —la sprint o el Gran Premio — a modo de ‘hándicap’ —vía parrilla invertida, por ejemplo — para los ‘poderosos’.

Lo que se disfraza de posible aumento de espectáculo es, para mí, un señuelo que se ha incorporado a las categorías menores para ‘atraer a la clientela’. Es decir, a pilotos que pagan —si es papá o un patrocinador es lo de menos — y que no se sientan frustrados por la falta de resultados.

En otras palabras, se sacrifica una vez más el concepto de ‘deporte’, en aras del espectáculo. Aunque entiendo que, en cualquier actividad deportiva actual, el sentido del espectáculo resulta un componente vital para la supervivencia económica de la especialidad.

Pero me reafirmo. Incluso en el caso de que las carreras sprint fueran algo provechoso para el espectáculo, deberían darse en todas o en ninguna. ¿O es que los aficionados que asisten a otros Grandes Premios no pueden gozar del mismo espectáculo que los seis que tienen carreras sprint?

Creo que el concepto de sprint acabará imponiéndose. Tiene algunas ventajas —teóricas por el momento en algún caso — para los organizadores del Gran Premio. Por ejemplo, atraer más público el sábado… y también los viernes… siempre y cuando la clasificación sea un poco más tardía. Puede haber un público de sábados y otro diferente el domingo, y colocar ambos días el cartel de no hay entradas. Supongo que los expertos en marketing tendrán muchas ideas al respecto.

Pero en cualquier caso lo digo claramente: o todos o ninguno. Ya llevamos dos años de experimento, entraremos en el tercero. Si no convence ya, es que no resulta bueno.
Lo dicho, no hay Gran Premio de primera y de segunda. Todos deben ser ‘división de honor’.