Pedro Sánchez confía en los eléctricos y la ministra Ribera compraría un híbrido

La fecha de 2040 causa debate sin parar. Será entonces cuando en España no puedan matricularse coches que emitan cualquier tipo de residuo fósil. Diez años más tarde la prohibición se extenderá a la circulación como tal. Por ello, Pedro Sánchez considera vital que la industria española acometa cuanto antes una transición que tarde o temprano tendrá que darse. El coche eléctrico y autónomo ha de ser el futuro de España. ¿La razón? Poder exportar dentro de poco más de dos décadas el 80% de nuestra fabricación, tal y como sucede hasta ahora.

Estas declaraciones vienen al paso de lo comentado por el diputado del PDeCat Carles Campuzano, que afirma que la ley del cambio climático ha provocado tanto estupor como preocupación en el sector. También influyen en el argumento de Sánchez las previsiones de otros países, que pretenden la misma prohibición que el nuestro en un plazo de tiempo más corto. Si no nos adaptamos a la vez que ellos no podremos exportar.

En la línea del argumento de Sánchez se ha mostrado la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, que asegura que aún tenemos mucho tiempo por delante para adaptarnos a la nueva era de la movilidad. Eso sí, a corto plazo Ribera apostaría sin duda por un vehículo con motor híbrido. "Hoy puede haber coches eléctricos que si uno tiene en su casa el enchufe correspondiente, lo puede gestionar y si no… Como yo no tengo enchufe en el garaje, me parece que lo práctico sería comprarme un híbrido", dijo la ministra en Los Desayunos de Televisión Española.

"Los que tenemos hoy coche podemos estar tranquilos. Esa certidumbre también existe. Tenemos todavía mucho tiempo de coches mucho más eficientes de motor de combustión y coches híbridos. La de 2040 es una fecha prudente", ha añadido Ribera para tranquilizar a la población, no sin antes referirse a la obligación de que las gasolineras instalen puestos de recarga eléctrica. “Están acostumbradas a cosas más complejas”.