Autobello 2015: una oda al glamour

Autobello nació en 2008 en la fusión entre vehículos 'con pedigrí' y relojes de primer nivel, llegando a 100 vehículos exclusivos en su primera edición. Con el tiempo el evento se ha ido magnificando y se ha convertido casi en un concurso de diseño y belleza. La cantidad de vehículos crece año tras año, llegando a más de 500 vehículos inéditos. Este año no ha sido excepción y ante un gran número de personas se han vuelto a exponer algunas joyas del automovilismo.

Y es que el peso que ha ganado Autobello ha provocado que las marcas quieran estar presentes sobre el césped de la Casa de Mónico. Eso se nota en la flota de vehículos que pueden 'degustar' los aficionados, ya que por ejemplo BMW ha comparecido este año con el i8 -como hiciera en 2014-, el X6 M o el M5, Mini con su icónico modelo, Porsche gracias al concesionario Madrid Norte con algunos 911 y otros de sus coches más exclusivos o Hyundai con el Génesis.

Sin embargo, el gran atractivo de este evento son las unidades privadas que los dueños quieren compartir con los visitantes como nosotros. Es imposible hacer un listado con todos los vehículos que se han podido ver en esta octava edición de Autobello. Algunos Ferrari 458 Italia, unidades del Porsche Cayman GT4 o un Mercedes SLR Stirling Moss han sido algunas de las estrellas del evento celebrado en la tarde de ayer. Tampoco ha faltado un Aston Martin DB9 o todo un ejército de Lamborghini, de todos los colores y épocas.

Autobello también ha tenido un pequeño espacio para la competición, aunque con un matiz menos importante. Sin embargo, sobre el césped en este exclusivo evento hemos podido ver un Porsche conmemorativo de la décimo séptima victoria de la marca en Le Mans, uno de los Toyota Aygo participantes en la Copa Kobe del Campeonato de España de Rallies de Tierra (CERT) o el Mclaren de Teo Martin que compiten en el GT Open.

Como no puede ser de otra manera, tampoco han faltado los clásicos. Algún Hispano-Suiza o una unidad del Mercedes-Benz 300 SL (alas de gaviota) han sido también fotografiados hasta la extenuación. Y en este grupo casi podemos incluir al ganador del mejor Porsche 911, mérito que recayó sobre un Porsche 911 RS de 1992. Uno de los ganadores de esta fiesta de puro glamour que comenzó con la llegada de los primeros vehículos sobre las 18h y terminó bien entrada la noche, puesto que nadie se resiste a pasar unos minutos más con las joyas motorizadas presentes.