La tercera zona de DRS de Baréin, más corta para evitar el adelantamiento fácil

Hace poco más o menos un mes, la FIA anunció cambios en las zonas de DRS de cinco circuitos y Baréin es uno de ellos. Pero en este caso no se trata de facilitarlos, sino de lo contrario, dificultarlos.

En realidad la palabra ‘dificultarlos’ no es del todo exacta. Lo que no quiere la FIA es que sea fácil ‘rebasar’ al coche que precede, con un diferencial de velocidad espeluznante entre perseguidos y perseguido. Estos adelantamientos a mitad de recta que el pasado año se vieron en más de un circuito.

La idea que se persigue es hacer que adelantar siga siendo una maniobra de una cierta dificultad, espectacular. Ya hemos defendido muchas veces que lo importante es la maniobra, que se note la intención, que existan posibilidades. Que se culmine o no es otro cantar, pero tanta belleza y emoción encierran las maniobras de ataque como las defensivas. Eso es algo que se pudo constatar el pasado año.

Los cinco circuitos incriminados son Baréin, Arabia, Australia, Bakú y Miami. Se actuará tanto modificando el punto de detección como el punto de apertura del DRS. En caso de la prueba de este fin de semana, la zona 3, la de la recta principal, será 80 metros más corta. La activación no tendrá lugar a 250 metros de la última curva, sino a 170 metros. Se espera así que el adelantamiento se consume al entrar en la zona de frenada. Tan perverso es que los adelantamientos sean imposibles como que sea demasiado sencillo. El equilibrio no es fácil de conseguir, pero debe buscarse.

De hecho, los principales cambios de reglamentación habidos el pasado año van en este sentido, el de corregir un punto clave: poder seguir de cerca al que precede. Pero si se sigue de cerca en la entada de la curva, la acción del DRS puede ser excesiva si se prolonga demasiado en la recta.