Baic Arcfox-7: el deportivo eléctrico de Campos Racing

El primer superdeportivo eléctrico con ADN español -con permiso del Volar-e de Applus Idiada- ha querido romper con los diseños 'eléctricos'. De esta forma nos encontramos con un capó de perfil bajo que acentúa los pasos de rueda. El paragolpes delantero soporta los afilados faros delanteros con tecnología LED. Su techo tiene una caída propia de los coupé, mientras que su zaga es coronada por un alerón. Un diseño aerodinámico -con cámaras en lugar de retrovisores y puertas estilo tijera- en fibra de carbono más propio de otro tipo de deportivo. Además, cada paragolpes presenta una pantalla panorámica capaz de mostrar imágenes dinámicas.

En su interior este biplaza de 4,5 metros de largo esconde un motor de 603 caballos capaz de acelerar de 0 a 100 en 3 segundos, siendo su velocidad máxima los 260 kilómetros por hora. Con un peso de 1.755 kilos, quizá lo más importante es que su autonomía se fija en los 300 kilómetros, con un tiempo de recarga de 45 minutos. Monta frenos de cuatro pistones y discos carbocerámicos y cuenta con una suspensión adaptativa según sus tres modos de conducción.

En su interior cuenta con tres pantallas táctiles configurables que engloban todos los controles del coche. Además, Campos Racing ha dotado a este superdeportivo eléctrico de comunicación wireless, por lo que se podrán activar ciertas funciones desde el móvil.  Sin embargo, lo más destacado es que este superdeportivo no es su diseño, sus prestaciones o su funcionalidad. Lo más importante es que este superdeportivo eléctrico abre las puertas de la tecnología de competición para que Baic la utilice en la homologación de futuros vehículos eléctricos.