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El que no arriesga no gana. O eso dicen... En McLaren se han apoyado en el dicho para pasar de la teoría a la práctica; y realizar el complejo, al igual que precioso, MP4-30. El bólido hecho a medida en Woking, que tendrá el honor y el complicado papel de volver a portar el propulsor V6 fabricado en Sakura muchos años después de la separación de la unión más legendaria de la F1. 

Dos instrumentos de una calidad suma y precisa, que gozan de la capacidad de derrochar un sonido envuelto de belleza. Un dueto que tras pasar un invierno de horas en el estudio buscando su música, se encuentra ahora en fase de 'soundcheck'. En Barcelona volverán a afinar y probar el MP4-30 de motor Honda y chasis McLaren de cara al concierto que se avecina en apenas un mes.

Los honores para los campeones de 2014 aguardan en forma de Laureus. El prestigioso premio ya tiene a sus potenciales vencederes que se frotan las manos y ensayan discursos para la ocasión. La F1 tendrá su protagonismo en la gala a través de Lewis Hamilton, su todopoderoso equipo Mercedes y la revelación de este año: Daniel Ricciardo.

Ángel o demonio. O le adoras, o le odias. Así son los sentimientos con Fernando Alonso. Incluso en su propio país ha creado una oleada de ateos con el cartel nominativo de 'antis'. Nadie es profeta en su tierra. También cuenta con creyentes acérrimos que se enzarzan en batallas dialécticas interminabales con todo el que tome su nombre en vano. Normalmente los citados anteriormente. Y una realidad: su talento.

Pasito a pasito. Pulgada a pulgada. Carrera a carrera. Discursos 'cholistas', o en una época más anterior, Al Pacino en 'Un domingo cualquiera'. Ferrari ha cambiado la filosofía de ganar Mundiales por la boca en enero, para traducirlo en trabajo y humildad por bandera de cara al público. ¿Realidad? Tomando por referencia Jerez, estarán ahí. Según Marc Gené o Marchionne, no esperen milagros.

El caballero inglés. Un hombre pegado a un mono de Fórmula 1 y un aura de galán que ilumina el paddock. Pero no está aquí para un desfile de modelos. Jenson Button ha vuelto a nacer con el resurgir de la unión McLaren-Honda. Su puesto peligró por momentos con la puja del joven Kevin Magnussen, pero pesó la experiencia pasada del británico con Honda. Los japoneses han vuelto, y Jenson quiere volver a la cima.

Comedido el finlandés. Calma, esto acaba de empezar. El piloto de moda en la Fórmula 1, querido por muchos, en la cresta de la ola de rumores de posibles fichajes por Mercedes o Ferrari, da su valoración sobre los test de Jerez. Una valoración un tanto incrédula. Valtteri Bottas cree que los tiempos vistos en Jerez tanto por parte de Williams, como del resto, no tienen mucha importancia.  

Mirada perdida hacia un infinito mejor. Semblante serio, lánguido, mientras depositaba su cuerpo a la suerte del RB10 de motor V6. Una nueva era híbrida que sacó la peor versión del tetracampeón. Un mundo de contrastes al lado del siempre entusiasta Daniel Ricciardo. El australiano de sonrisa eterna que desmontó al alemán en 2014. Un cambio. Ferrari. Y la felicidad está de vuelta.

Polémico. Extravagante. Único. Italiano. Flavio Briatore. Un tipo feliz. Un hombre acostumbrado a deslizarse entre la metrópolis de personalidades que rodean al Gran Circo. Eso también me faltaba: cercano. Muy amigo de Fernando Alonso. Imposible no recordar épocas pretéritas de éxitos entre asturiano e italiano unidos al rombo francés.

La gélida mañana de Jerez se fue evaporando al transcurso de los segundos. Lentamente, el circuito despertaba y abría los ojos al nuevo arma del campeón. Traído desde Brackley, el W06 posaba para los flashes de un tímido paddock, a medias entre la oscuridad y la luz, con los ojos todavía cansados. Allí estaba. El heredero del imperio. Luego apareció el Williams con esa nariz de alerón que no acaba de convencer al respetable. La mañana prometía.

Apurando al máximo para gozar de alas en 2015...y en Jerez. Las van a necesitar. Para empezar, los de Milton Keynes volvieron ir a la espalda de Mercedes. Los de Brackley presentaron su artilugio a primera hora de la mañana, mientras que en Red Bull se lo tomaron con filosofía para dar a conocer el coche que ha de mirar a los ojos al W06: el RB11.

La mañana se despertó tímida y perezosamente en Jerez. La luz del día no quería madrugar. El frío golpeaba al circuito andaluz. El silencio que precede a la tormenta. A la tempestad de los monoplazas afinando su desafinada sinfonía de V6. Una manta escondía el nuevo invento de Brackley. Quizá nadie quería conocer la posible dura realidad: la del W06 dominador.  

Rojo sangre. Rojo pasión. Rojo leyenda. Il Cavallino Rampante quiere resucitar con Vettel a los mandos. La catarsis ferrarista durante 2014 tiene su producto final. Un bólido destinado a una temporada difícil. O eso dicen desde Maranello. A través de internet fueron marcando los pasos hasta este día 30, el esperado para revelar el SF15-T.

Otro más. No es el plato fuerte del día (ese es Ferrari), pero su preocupante temporada de 2014 (muy alarmante) han hecho que la presentación del C34 se convierta en un reclamo para el mundo de la Fórmula 1. Sauber presentó el monoplaza con el que esperan revertir su suerte en esta nueva temporada.

Hacer historia. Hace tiempo que en McLaren divagan por un clima de resignación que se acabó con la llegada de Honda. Un motor para dominar. Una unidad de potencia que pueda mirar a los ojos del V6 de Mercedes. Para repetir hazañas pretéritas. Button y Alonso harán las veces de Senna y Prost. El MP4-30 ya está aquí. McLaren-Honda ha vuelto.