Chester niega que el accidente de Grosjean fuera por un fallo del E23

Corría la vuelta 11 de la carrera en el circuito de Sochi cuando, en la curva 3, el francés perdía el control del vehículo y se iba contra las barreras. Pese a lo aparatoso de un accidente a alta velocidad, en el que hasta el asiento del piloto quedo dañado, Romain salió ileso, si bien gran parte del coche quedó destruida, haciendo necesarias una buena cantidad de reparaciones.

No hay indicios ni en los datos ni en las piezas de que algo se rompiera y lo causara

Así, Chester niega que el accidente se debiera a algún problema mecánico del coche, y señala a la pérdida de agarre aerodinámico como la causa más probable: "No hay indicios ni en los datos ni en las piezas de que algo se rompiera y causase el accidente. No es fácil sacar conclusiones de las investigaciones de los accidentes, pero parece que quizás Romain estaba un poco cerca del McLaren y perdió algo de carga aerodinámica, acabando con el agarre. No hay nada que podamos ver que señale hacia un fallo del coche".

Sobre las reparaciones que va a necesitar el E23 del francés, Chester ha admitido que el monoplaza quedó bastante dañado, ya que se trató de un accidente "bastante importante", especialmente en un lado del coche: "La parte derecha sufrió los daños; las suspensiones delanteras y traseras del lado derecho, el morro, el alerón trasero, la estructura antichoque... Sin embargo, no hemos visto nada que debiera evitar que juntáramos de nuevo todas las partes del coche".

Por último, ha explicado que todas esas reparaciones deberán hacerse en su garaje del Circuito de las Américas de Austin durante el Gran Premio de Estados Unidos de este fin de semana: "Cualquier trabajo que haya que llevar a cabo en los monoplazas se realizará en la pista hasta Abu Dabi, esto significa que los mecánicos estarán ocupados en Austin con la reconstrucción del monoplaza de Romain".