Brawn se siente "ofendido" por las críticas recibidas

El director deportivo de la F1 ha mostrado su indignación ante los comentarios que indican que los actuales directivos de la Fórmula 1 están embruteciendo la competición: "La Fórmula 1 tiene una larga historia de competencia. Es la cumbre del automovilismo. ¿Por qué elegiríamos dañar eso?”, ha citado Brawn en declaraciones para Radio Sport New Zealand.

Las sugerencias negativas no sólo le ofenden, sino que le parece que están fuera de toda lógica al analizar la situación de la F1 como la de un negocio, no como la de una categoría deportiva.

"Encuentro personalmente ofensivo cuando la gente me acusa de embrutecer el deporte. Sabemos que si lo hiciéramos estropearíamos el deporte en su esencia. También arruinaríamos la base comercial del deporte", ha agregado el británico.

Es la base comercial del deporte la que está muy presente en la mente de Brawn en este momento. Sus próximas propuestas para el futuro de la Fórmula 1 buscan hacerlo más viable económicamente para equipos más pequeños. 

"Los equipos en la cima probablemente estén gastando dos o tres veces más de lo que estaban gastando hace cinco o seis años, y no dirías hace cinco o seis años que el deporte era tonto”, ha remarcado Brawn.

El británico retoma el tema del techo presupuestario y lo señala como la base para una competencia más emocionante en el futuro: "Tenemos que ayudar a los equipos en la cima a reconocer y darnos cuenta de que para tener un deporte viable de cara al futuro tenemos que volver a calcular los ingresos comerciales de los equipos. Tenemos que volver a calcular la cantidad de alcance que los equipos pueden explorar técnicamente para ofrecer una competencia más emocionante", ha detallado.

Pese a las discrepancias entre Ferrari y Liberty Media y la amenaza del conjunto de Maranello de irse de la Fórmula 1, Brawn insiste en que hay áreas en las que todos los equipos están de acuerdo: "En términos generales, el lado técnico –que estamos negociando– cuenta con el apoyo de todos los equipos".

"Lo que parecería un simple desafío técnico u objetivo a veces se ve empañado porque los equipos son sensibles a otras áreas y por lo tanto no cooperan. La gobernabilidad es un tema delicado. Los ingresos comerciales para los equipos son un tema delicado. El control del presupuesto, que es algo que nos entusiasma mucho, es un tema delicado. Siempre hay intereses cruzados. No es sólo un problema técnico simplemente", concluyó Brawn.

Si quieres leer más noticias como ésta visita nuestro Flipboard