Alfa Romeo

 

LOS INICIOS DE LA MARCA ALFA ROMEO

El origen de la marca está ligado a la fundación de la Compañía Italiana de Automóviles Darracq, que nació en Nápoles el 6 de abril de 1906 y que se dedicaba a producir modelos de la matriz francesa bajo licencia. A finales de ese mismo año se trasladan a Milán y comienzan la construcción de una fábrica en la zona de Portello.

El bajo número de ventas de la empresa propició que, apenas tres años después, en 1909; la empresa fuese absorbida por un grupo de empresarios lombardos. La adquisición completa de la misma tuvo lugar el 24 de junio de 1910, momento en el cual la empresa cambió su nombre a ALFA –acrónimo " Anonima Lombarda Fabbrica Automobili"–. Ese mismo año, la recién creada Alfa Milano lanza su primer modelo, el 24 caballos. Diseñado por Giuseppe Merosi, tuvo mucho éxito y fue seguido por otros modelos.

Antes de la entrada de Italia en la Primera Guerra Mundial, las ventas del Alafa Milano aumentaron paulatinamente, pasando de 80 unidades en 1911 a 272 en 1914, para luego descender a 207 en 1915. Con la entrada del país en la Primera Guerra Mundial, en 1915, entran en crisis porque carece de los recursos necesarios para convertirse a la producción de guerra.

Para buscar una solución a la complicada situación, Alfa decide vender la empresa a través de la mediación del Banco de Descuento italiano a Nicola Romeo, un ingeniero mecánico de Sant'Antimo. El 4 de agosto de 1915 éste asume la dirección de la planta de Portello y en el transcurso de dos años su grupo industrial adquiere el control de la empresa. Durante este tiempo se centrará en la fabricación de municiones y motores de aviación.

Después de la guerra, Romeo retoma la producción de automóviles y cambia el nombre a Alfa Romeo Milano. El certificado oficial de nacimiento de Alfa Romeo está fechado el 3 de febrero de 1918. La comercialización de los Alfa 15, con 20 caballos de antes de la guerra se reinicia en 1919. En 1920 se lanzó el Alfa Romeo 20, con 30 caballos, el primer modelo de carretera que se comercializó con el nuevo nombre de la empresa.

Sin embargo las bajas ventas debido a la ausencia casi total de una red de concesionarios y la desorganización de la empresa, será lo que esté a punto de costar su desaparición.

Hoy, un siglo después, la marca se mantiene viva, dentro del grupo Stellantis con la misma filosofía de deportividad y exclusividad que la vio nacer.

 

¿A QUÉ GRUPO PERTENECE ALFA ROMEO EN LA ACTUALIDAD?

Actualmente Alfa Romeo pertenece Stellantis, un grupo automovilístico internacional ítalo-franco-estadounidense con sede en Países Bajos, que fue fundado el 16 de enero de 2021, fruto de la fusión el grupo ítalo-estadounidense Fiat Chrysler Automobiles y el grupo francés PSA. El nombre de Stellantis proviene del verbo latín “stello” que significa "brillar con estrellas”.

Además de Alfa Romeo, bajo este paraguas se comercializan otras marcas italianas como Abarth, Fiat, Lancia o Maserati; las americanas Jeep, Chrysler, Dodge y RAM, las francesas Peugeot, Citroën, DS y las alemanas Opel y Vauxhall.

En la actualidad es uno de los grupos automovilísticos más potentes del mercado a nivel mundial, tanto por nivel de ventas como por producción; y sólo por detrás de Toyota, Volkswagen y General Motors.

Con más de 300.000 personas empleadas en todo el mundo, realiza operaciones industriales en 30 países y tiene presencia comercial en más de 130 países diferentes. Todo ello le permitió, en el primer semestre de 2021, obtener unos beneficios económicos de 5.936 millones de euros.

La gama actual de Alfa Romeo en España está compuesta por el Alfa Romeo Giulia, el Alfa Romeo Stelvio y el recién llegado Alfa Romeo Tonale.

 

¿QUÉ SIGNIFICA EL LOGOTIPO DE ALFA ROMEO?

Uno de los emblemas más icónicos y que menos variaciones ha recibido a lo largo de los tiempos es, sin duda, el de Alfa Romeo, pero ¿qué significado tiene?

Aunque existen varias versiones al respecto, la que más adeptos aglutina es la del técnico Giuseppe Merosi que, un día de 1910, esperando al tranvía, tuvo una idea: sentado en la plaza del Castello de Milán se fijó en la torre del Filarete, la principal del castillo de los Sforza. En ella se puede ver el Biscione, una serpiente con cabeza de dragón –sobre la que posteriormente se añadiría una corona ducal de oro– devorando a un hombre, y que además es símbolo de la casa de los Visconti. La serpiente simbolizaba la lealtad, el coraje, la perspicacia y la prudencia, mientras que el hombre devorado hace alusión a sus enemigos.

Con esa base, se decidió unir una cruz roja fina, sobre un fondo blanco, y que hace referencia al escudo de Milán, ciudad originaria de la marca.

El color azul del aro que rodea al conjunto contaba con las palabras Alfa y Milano –hasta 1972, cuando se suprimirá esta última palabra–. Ambas aparecen separadas por dos nudos sabaudos o saboyanos; que representan a la Casa de Saboya.

 

¿DE DÓNDE VIENE LA PALABRA ALFISTA?

Este término fue acuñado por primera vez en la década de los 50, cuando varios conductores de Alfa Romeo Giulietta comenzaron a referirse a sí mismos como "alfista o alfisti". El centro neurálgico de este grupo de apasionados de la firma italiana se encuentra en la localidad milanesa de Arese, hogar del RIAR – acrónimo de Registro Italiano Alfa Romeo–, que es el club oficial de Alfa Romeo.

 

ALFA ROMEO Y SU RELACIÓN CON LOS CUERPOS DE SEGURIDAD Y LA POLICÍA

La vinculación de la marca milanesa con los cuerpos de seguridad está muy presente desde que, en los años 50, la policía estatal adquiriese algunas unidades para probar. El primer modelo utilizado como coche de servicio fue el 1900, que recibió el apodo de "Pantera" debido al color negro elegido; así como a su diseño agresivo y a su agilidad y buen comportamiento. Para 1960 la decoración cambia y se torna en verde claro para, nuevamente en 1975; pintarse de color azul y blanco, que es el actual.

Por su parte, el primer automóvil adquirido por el cuerpo de Arma dei Carabinieri fue el todoterreno Alfa Romeo Matta; una versión "italianizada" del Jeep Willys. Posteriormente fue el turno del Giulietta. Para los años sesenta, el parque se renovó y se adquirieron varios Giulia y el 2600. En este caso, los coches serían conocidos como "Gazelle"; elegido para enfatizar la agilidad de las monturas. En 1969 los Carabinieri cambiaron la decoración de sus coches que pasó del color kaki al azul oscuro de la actualidad. Desde entonces los modelos más utilizados has sido: Alfasud, el Alfetta, el Nuova Giulietta, el 33, el 75, el 90, el 155, el 156 y el 159. 

Además, los coches de Alfa Romeo también se suministran a otros cuerpos policiales y de seguridad italianos; como la Guardia di Finanza, la Policía Penitenciaria, el Cuerpo Forestal del Estado, la Policía Provincial, la Policía Municipal policía y el cuerpo de bomberos.

En España también es habitual ver los automóviles de la firma italiana rodando por nuestras carreteras. Dentro del parque móvil estatal aún se pueden ver algunas unidades del Alfa Romeo 166 con motor de gasolina, aunque el grueso de vehículos de Alfa Romeo los tiene la Guardia Civil de Tráfico. A los aún comunes Alfa Romeo 159, se han unido una amplia flota de Alfa Romeo Stelvio. La última remesa llegó en 2021 con 301 nuevas unidades, todas equipadas con el motor diésel de 2.2 litros, 190 caballos y sistema de tracción total Q4.

 

ALFA ROMEO SPIDER: UN ICONO DE HOLLYWOOD A FINALES DE LOS AÑOS 60

Pocos coches han triunfado en el celuloide como lo ha hecho este pequeño deportivo biplaza. Desde que apareciese por primera vez en la película de El Graduado, conducido por un jovencísimo Dustin Hoffman; este deportivo ha ejemplificado a la perfección el diseño a la italiana. Años después, una unidad en bronce sería conducida por Michelle Pfeiffer en la cinta Tequila Sunrise.

Con una línea que prácticamente estuvo inalterada durante 27 años, se ofreció con motorizaciones, siempre de cuatro cilindros y entre 1.3 y 2.0 litros. La variante utilizada para la película de Hoffman fue un Alfa Romeo Spider Duetto de 1966, con motor de 1.6 litros, cuya potencia no llegaba a los 110 caballos.
Gracias al buen clima de California, es habitual ver este coche en carreteras de Los Ángeles, conducidos por estrellas de cine o por personas completamente anónimas que solo quieren disfrutar del sol y el viento en la cara.

 

MOTOR V6 BUSSO: UN PROPULSOR CON IDENTIDAD PROPIA

En la historia de la automoción, pocas mecánicas han sido tan reconocidas por el público como el propio coche al que mueven. Este es el caso de los motores Busso, una familia de propulsores V6 a 60 grados fabricados por Alfa Romeo desde 1979 hasta 2005; y que llevan el nombre de su creador, Giuseppe Busso.

Desarrollado a principios de la década de 1970, el primer automóvil en utilizarlo fue el Alfa 6. Aquella primera versión tenía 2.5 litros de cilindrada –concretamente 2.492 centímetros cúbicos–, culata con un solo árbol de levas en cabeza y 12 válvulas. Rendía 132 caballos y ofrecía mayor elasticidad que las mecánicas de cuatro cilindros de la época.

Posteriormente han existido versiones de dos litros turbo y diferentes variantes atmosféricas de 3.0 litros, hasta llegar a la última evolución de 3.2 litros; estos últimos equipados con doble árbol de levas en cabeza y 24 válvulas. La primera versión DOHC fue un V6 de tres litros equipado en el Alfa Romeo 164 de 1993, con un bloque motor y una culata de aleación de aluminio, con válvulas de escape rellenas de sodio.

Revistas británicas como EVO o Classic & Sports Car no dudan en calificar su sonido como el del mejor seis cilindros en V del mundo.

La producción de este motor terminó en 2005, en la planta de Alfa Romeo en Arese. La última tirada fue de 5.000 unidades, que se utilizaron en los modelos Lancia Thesis, Alfa 166 y Alfa GT. El diseñador Giuseppe Busso, fallece dos días después de la producción del último motor.

El legado y memoria de estas mecánicas se mantiene desde 2015 gracias a Fiat Powertrain, encargada de fabricar el nuevo motor V6 Biturbo a 90 grados derivado de Ferrari para el Giulia Quadrifoglio y el Stelvio Quadrifoglio.

 

ALFA ROMEO Y EL MUNDO DE LA COMPETICIÓN

La primera división corporativa de Alfa Romeo dedicada exclusivamente al automovilismo fue Alfa Corse, fundada en 1938. Este departamento estaba a cargo del diseño, construcción y mantenimiento de las unidades de carreras y fue inicialmente dirigido por Enzo Ferrari. 

En 1963, a instancias de Giuseppe Luraghi y gracias al compromiso de Carlo Chiti, nació el Autodelta, que al año siguiente se convirtió en la sección de carreras de la casa del Biscione. Este departamento externo fue creado para dotar a Alfa Romeo de una estructura ligera e independiente que liberaría a la empresa matriz del trabajo relacionado con las competiciones.

En 1966, Alfa Romeo compró Autodelta, que luego se convirtió en el nuevo departamento oficial de carreras de la casa, reemplazando al que estaba dentro de la empresa. En 1985 se liquidó Autodelta y, a partir del año siguiente, las carreras volvieron a ser dirigidas por la histórica sección de carreras de la empresa Alfa Romeo.

 

PRIMEROS AÑOS

Alfa Romeo debutó en el automovilismo en 1911 con el 24 caballos. Algunos ejemplares del modelo se inscribieron en la Targa Florio sin suerte y los decepcionantes resultados se repitieron nuevamente al año siguiente. El éxito en las carreras llegará en 1913 con una versión de carreras del 40 y el 60 caballos. El modelo ganó el ranking Parma-Poggio di Berceto primero en su clase y segundo en el ranking general. Esta victoria le dio a Alfa el impulso de mantenerse en competición.

En la década de 1920, Alfa Romeo amplia su actividad deportiva gracias a pilotos como Antonio Ascari, Giuseppe Campari, Enzo Ferrari y Ugo Sivocci. En 1923, el fabricante logró su primer gran éxito al ganar la Targa Florio con un doble triunfo. De hecho, Ugo Sivocci y Antonio Ascari cruzaron la meta en primer y segundo lugar a bordo de dos RL. Además es la primera vez que aparece el símbolo del Quadrifoglio o trébol de cuatro hojas. En 1925 gana el primer campeonato mundial de automovilismo organizado en la historia, y se alza con las victorias en el Gran Premio de Bélgica –en Spa-Francorchamps– y el Gran Premio de Italia –en Monza– gracias a Antonio Ascari y Gastone Brilli. 

Los años treinta están marcados por la asidua presencia de competiciones de prototipos deportivos. Los modelos más famosos y ganadores de este fueron el P3, 6C 1750, 8C 2300 y 8C 2900. Con ellos Alfa Romeo ganó seis ediciones consecutivas de la Targa Florio de 1930 a 1935 y conquistó todas las ediciones de la Mille Miglia de 1928 a 1938 a excepción de la de 1931, que era prerrogativa de Mercedes-Benz. También participó en las 24 Horas de Le Mans, donde ganó cuatro veces consecutivas de 1931 a 1934, con el 8C 2300. Además consiguieron las dos primeras ediciones del Campeonato de Europa –con Ferdinando Minoia y Tazio Nuvolari, en 1931 y 1932–; y dos campeonatos de Europa de montaña –1932 y 1933, con Rudolf Caracciola, Carlo Felice Trossi y Mario Tadini–.

En general, el coche de carreras Alfa Romeo más victorioso de este período fue el P3 o Tipo B, que fue diseñado por Vittorio Jano y múltiples veces galardonado gracias, en especial, a Tazio Nuvolari. Tras estas victorias, Alfa Romeo se retiró temporalmente de las carreras debido al estallido de la Segunda Guerra Mundial.
Prototipos.

La década de los setenta fue la más exitosa de la marca del Biscione en lo que a este tipo de competiciones automovilísticas se refiere, especialmente con el Tipo 33 y sus derivados en el mundial de prototipos deportivos. En la edición de 1975, Alfa Romeo se impuso en el mundial, mientras que en la edición de 1977 ganó todas las carreras de su categoría. Los impulsores de estos éxitos fueron Arturo Merzario, Jacques Laffite, Jochen Mass, Derek Bell, Nino Vaccarella, Jean-Pierre Jarier, Vittorio Brambilla y Henri Pescarolo.

 

COMPETICIONES DE TURISMOS

Una de las disciplinas en que más éxito ha cosechado Alfa Romeo es, sin duda, en los campeonatos de turismos de diferentes países europeos.

Los años sesenta estuvieron plagados de éxitos. Las victorias en esta categoría comenzaron con el Giulia GTA y continuaron con sus versiones posteriores. Con estos coches, Alfa Romeo ganó con autoridad seis campeonatos europeos de turismos –1966, 1967, 1969, 1970, 1971 y 1972–.

Entre 1982 y 1985, Alfa Romeo se alzó con cuatro campeonatos de marca consecutivos en el europeo de turismos. El modelo que consiguió los galardones fue el GTV6.

Sin embargo el modelo más reconocido de la década moderna y que mayores títulos ha cosechado, fue el Alfa Romeo 155 en diferentes versiones, que dominó los circuitos entre 1992 y 1997:

Nicola Larini –campeonato italiano de turismos de 1992 con un Alfa Romeo 155 TS–

Nicola Larini – DTM de 1993 con un Alfa Romeo 155 TI V6–

Gabriele Tarquini –BTCC de 1994 con un Alfa Romeo 155 TS–

Adrian Campos –Campeonato de España de Turismos de 1994 con un Alfa Romeo 155 TS–

Luis Villamil –Campeonato de España de Turismos de 1995 con un Alfa Romeo 155 TS–

Fabrizio Giovanardi –Campeonato de España de Turismos de 1997 con un Alfa Romeo 155 TS–

El Alfa Romeo 75 también consiguió varias victorias absolutas con Gianfranco Brancatelli –en el campeonato italiano de 1988– o Luis Perez-Sala, en 1991, en España.

En 1988 Luis Villamil consiguió una victoria absoluta en el campeonato nacional de turismos con un Alfa Romeo 33 y Fabrizio Giovanardi se alzó con la victoria absoluta en el italiano en los años 1998 y 1999 con un Alfa Romeo 156; a la postre, el último vencedor de un certamen de estas características.

En 2022 la firma del Biscione volvió a esta competición, pero en formato 100% eléctrico, con un Alfa Romeo Giulia en el ETCR; quedando en tercera posición.

 

ALFA ROMEO Y LA FÓRMULA 1

El comienzo de la década de 1950 estuvo marcado por dos victorias en el Campeonato Mundial de Fórmula 1. De hecho, Alfa Romeo ganó las dos primeras ediciones de este certamen al alzarse con el título en las temporadas de 1950 y 1951 gracias, respectivamente, a Nino Farina a bordo de un 158 –apodado "Alfetta" por su pequeño tamaño– y a Juan Manuel Fangio, quien pilotó un 159. Tras estos dos laureles, Alfa Romeo se retiró temporalmente de este campeonato.

Para 1960 regresa como motorista de algunos equipos pequeños como LDS, Cooper y De Tomaso, pero sin dar el salto de manera oficial. Habrá que esperar a finales de la siguiente década para que esto suceda.

En los años setenta, Alfa Romeo continuó suministrando propulsores a varias escuadras con el objetivo de convertirse finalmente en equipo y constructor. Así, suministró sus mecánicas V8 a McLaren y March entre 1970 y 1971. Más tarde, construyó motores V12 para Brabham, que los utilizó de 1975 a 1979. Este último año de la década será el elegido para regresar, de manera oficial, de la mano del Alfa Romeo 177, aunque sin registrar resultados significativos.

Alfa Romeo se mantuvo en el calendario de monoplazas con los modelos 182, 183T, 184T y 185T. Estuvieron alineados de 1982 a 1985 con poca satisfacción y sin siquiera ganar un Gran Premio. El mejor resultado fue el sexto puesto en el campeonato de constructores de 1983. Para la temporada de 1987 firman un contrato con Ligier para el suministro de motores. Sin embargo, este acuerdo fue cancelado tras la adquisición de la casa Biscione por parte del grupo Fiat. Alfa Romeo también fabricó motores para el Osella de 1983 a 1988, y esta fue su última aparición en la Fórmula 1.

En noviembre de 2017 Sergio Marchionne anuncia el regreso a la competición de Alfa Romeo de la mano de Sauber para 2018 con el que el fabricante italiano también ha llevado a cabo una cooperación tecnológica, técnica y comercial. Esto resultó en un cambio del nombre oficial del equipo suizo, que pasó a llamarse Alfa Romeo Sauber F1 Team.

En 2019 el nombre pasa a ser Alfa Romeo Racing y la decoración del nuevo automóvil, el C38, presenta el histórico logotipo de Alfa Romeo Quadrifoglio.
Con la llegada, en 2020 de la petrolera polaca PKN Orlen, el equipo pasa a llamarse Alfa Romeo Racing ORLEN.