El sábado del Gran Premio de Hungría fue especial, pero no sólo porque McLaren logró meter a ambos monoplazas en Q3, ni por el renacer de Ferrari, que logró copar la primera fila de parrilla tras los pinchazos de Silverstone, lo fue porque el bicampeón de la Fórmula 1, Fernando Alonso, cumplía años. 36 para ser exactos.