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Carlos Sainz atribuye su discreta sesión de clasificación a la falta de preparación, y es que el piloto madrileño apenas ha podido rodar en todo el sábado. En los Libres 3 ha tenido un problema con la batería de su motor, mientras que al principio de la Q1 una de las tuercas de sus neumáticos se ha quedado encasquitada. El madrileño ha llegado a la cronometrada sin confianza en su coche y esta situación se ha visto reflejada en el cronómetro.

Toro Rosso espera un fin de semana duro en el Gran Premio de Japón. La competitividad del STR11 está al límite de los diez primeros clasificados y puntuar será complicado el domingo. Sin embargo, la alta probabilidad de lluvia para mañana - la cual, con menos posibilidades, también se espera el domingo - podría beneficiar a la escudería de Faenza para lograr un buen resultado y sumar más puntos para el Campeonato. 

Pese a la mala racha de Daniil Kvyat tras su descenso a Toro Rosso, las últimas informaciones sugieren que podría continuar en la F1 la próxima temporada. Durante semanas, los rumores apuntaban a que Pierre Gasly, actual piloto de GP2, ocuparía el puesto de Kvyat en 2017. Sin embargo, ahora algunos medios como Guiamotor o las agencias de noticias rusas Ria Novosti y Tass sugieren que el ruso habría firmado un contrato por dos años con Red Bull.

Las bromas entre pilotos tienen más impacto en los aficionados en la actualidad. Las redes sociales hierven con los snapchats o los tweets de los pilotos, y hoy Lewis Hamilton y Carlos Sainz han intercambiado fotos divertidas sobre sus personas. El primero hizo una foto en la rueda de prensa de pilotos, disfrazando al madrileño de ciervo usando Snapchat. 

Lewis Hamilton es un ávido usuario de Snapchat y esta mañana no ha podido resistir la tentación de inmortalizar algún momento de la rueda de prensa oficial de la FIA. Su víctima ha sido Carlos Sainz, uno de los asistentes.

Carlos Sainz es consciente de las limitaciones actuales de su Toro Rosso y por este motivo recibiría la lluvia con los brazos abiertos. La climatología puede tener un papel clave en el Gran Premio de Japón, pues hay altas probabilidades de lluvia para el sábado y razonables posibilidades para el domingo. En 2015 el piloto madrileño ya brilló al liderar los Libres 1 sobre pista mojada. 

Carlos Sainz ha confirmado que Toro Rosso ha encontrado el origen de sus problemas, y básicamente no eran problemas, sino simplemente que la escudería de Faenza cedió ante el desarrollo constante de las escuderías rivales y también coincidió el estreno del paquete aerodinámico de Alemania con circuitos no favorables para el STR11. 

Carlos Sainz ha calificado abiertamente de "inútil" el sistema del coche de seguridad virtual como uno de los grandes obstáculos para la progresión de las escuderías de mitad de la parrilla durante el transcurso de las carreras. Según el madrileño, la ralentización automática que sufren los pilotos tras producirse un accidente beneficia directamente a las estructuras más competitivas en detrimento del resto de monoplazas, una situación que ve “innecesaria” bajo la estructura de la Fórmula 1 actual.

Toro Rosso aterriza en el Gran Premio de Japón con un bagaje bastante negativo. En las últimas cinco carreras, solo uno de sus pilotos ha logrado puntuar, por lo que el equipo de Faenza necesita urgentemente recuperar sensaciones y volver a ser competitivo. Las últimas dos carreras han supuesto un soplo de aire fresco, ya que el equipo ha mostrado una leve mejoría. Así, Carlos Sainz y Daniil Kvyat llegan a Suzuka con la esperanza de puntuar, una necesidad acuciante sobre todo para el ruso, que necesita demostrar que merece un asiento en 2017.

James Key puede llegar a Williams en 2018. El actual director técnico de Toro Rosso es el claro favorito para sustituir a Pat Symonds en el equipo de Claire Williams. Pat está a punto de jubilarse - tiene 63 años - y eso abre la puerta a movimientos en el mercado de fichajes de ingenieros. Desde Auto Motor und Sport dan por hecho que Key estará en Grove para 2018. El contrato del británico con Toro Rosso termina en 2017, con lo que hay una opción clara de un cambio de aires.

Carlos Sainz estuvo de suerte en el Gran Premio de Malasia. El piloto madrileño estuvo a punto de perderse la salida de la carrera porque se le apagó el motor por calentamiento del embrague. Sin embargo, gracias a la ayuda de su ingeniero, se las arregló para encender de nuevo el propulsor a través de un comando en el volante y arrancó justo cuando se apagaron las luces del semáforo. 

Carlos Sainz se ha mostrado abiertamente resignado con la falta de rendimiento del STR11 tras finalizar 11º en el Gran Premio de Malasia, un resultado insuficiente vistas las altas expectativas fijadas por Toro Rosso antes del fin de semana. Aunque las sesiones de entrenamientos y la clasificación ya vislumbraran un horizonte de sufrimiento bajo las largas rectas de Sepang, Sainz afirma estar preocupado con la pobre velocidad punta del monoplaza y su incapacidad para superar en pista a escuderías naturalmente menos competitivas como Renault, quienes han batido contra todo pronóstico a la formación de Faenza en situación de tanda larga. 

El ambiente interno en el equipo Toro Rosso apunta a una intensa autocrítica tras su pobre rendimiento en la sesión clasificatoria del Gran Premio de Malasia, donde Kvyat y Sainz no han pasado del 15º y 16º lugar, respectivamente. Tanto pilotos como ingenieros coinciden de forma unánime en que la extrema debilidad del STR11 a las largas rectas de Sepang no pueden constituir un presagio de su previsible caída de rendimiento hasta final de temporada, especialmente después de firmar un brillante resultado hace dos semanas en la Q3 de Singapur. Las extremas variaciones de rendimiento según la naturaleza de los circuitos siguen determinando la competitividad de la estructura de Faenza, donde ven cada vez más improbable la posibilidad de conseguir puntos en la carrera de mañana vista la fortaleza de sus competidores directos en la lucha por la zona media.

Carlos Sainz ha caído eliminado en la Q2 del Gran Premio de Malasia. La falta de velocidad punta de su Toro Rosso le ha perjudicado en un circuito donde la potencia es importante, pero el madrileño confía en el apoyo aerodinámico de su STR11 para firmar una buena actuación en la carrera de mañana.